August Corominas, profesor de Fisiología Humana de la Universidad de Murcia y de la Universidad Autónoma de Barcelona y académico emérito y miembro del Senado de la Real Academia Europea de Doctores-Barcelona 1914 (RAED), comparte con la comunidad académica el artículo «Nuevo apocalipsis y batalla de Armagedón«, en el que aborda los diversos peligros que amenazan a la humanidad por la propia acción del ser humano. El académico ha compartido recientemente en esta publicación los artículos «Los cuatro jinetes del apocalipsis gerontológico: soledad, silencio, dolor y nocturnidad», «Reflexión antropológica de la edad centenaria«, «De abuelos a nietos», «¿Es posible llegar a los cien años o incluso más?», «Mecanismos de tanatoquímica y tanatofísicos en el proceso de morir«, «Genética y envejecimiento. Progeria y síndromes progeroides», Los grandes beneficios del aquagym, «La bondad y la maldad«, «El papel vital de los abuelos», «La fragilidad de los mayores», «Los rostros del mal», «Maldad y crueldad. Apocalipsis destructivo en las guerras actuales», «La furia de los dioses», «Atención con la fragilidad y las caídas de los mayores», «La salud de los refugiados», «Fragilidad y antifragilidad» y «La maldad de Putin». Además, es autor de uno de los capítulos del libro «Vitalidad al envejecer. Si lo deseas, puedes vivir más años con salud», editado por la Real Corporación con el apoyo de Vichy Catalán.
Nuevo apocalipsis y batalla de Armagedón
En la Biblia, el Apocalipsis es el último libro del Nuevo Testamento y describe una serie de visiones catastróficas y apocalípticas. En el capítulo 6, se habla de los cuatro jinetes del Apocalipsis, que son descritos como cuatro seres que cabalgan sobre caballos blancos, rojos, negros y pálidos. Aunque algunas interpretaciones difieren, la mayoría interpreta que los cuatro jinetes son vistos como un símbolo de conquista, guerra, hambre y muerte y destrucción, la más terrible.
La batalla de Armagedón es la batalla futura entre el cordero y el mal y se considera como uno de los puntos finales es la lucha entre Dios y sus hombres buenos y Satanás y sus hombres malvados. Dice la Biblia que bajó fuego del cielo y devoró a los hombres malos. Y a Satanás, acompañado también por la bestia y el falso profeta. En la batalla de Armagedón participan todas las naciones de la tierra.
En el Apocalipsis se menciona este evento junto a varios elementos que cogen luz para comprender su significado. Según la interpretación futurista del Apocalipsis, que es nuestro punto de vista, la batalla de Armagedón será una batalla real en el futuro, cerca del final de la tribulación las influencias demoniacas harán que los reyes de la tierra reúnan a los ejércitos para un ataque final.
Desde 1947 existe un reloj físico que está señalando el fin del mundo. Es un reloj manejado por una asociación de científicos, instalado después de que estallasen las bombas atómicas sobre Hiroshima y Nagasaki. Está señalando la carencia de 100 segundos para el fin del mundo. Se va moviendo en función de los acontecimientos que hacen temer la explosión de una futura bomba nuclear. Las agujas avanzan o retroceden según la posibilidad de una catástrofe apocalíptica provocada por alguna nación. Siempre hay riesgo.
En Tasmania se ha instalado un dispositivo para, si fuese el su caso, información por si hubiera algún problema imprevisto sobre el fin del mundo. Un Apocalipsis inesperado. ¿Existe algún mandatario capaz de bombardear con armas nucleares? Desgraciadamente creo que sí.
Hoy hay muchos apocalipsis, además de las clásicas guerras, tenemos muchas más causas de sufrir y morir. Tenemos sed, oscuridad, frío, torturas, tales de energía, pobreza, pandemias, campos de refugiados, soledad, incendios provocados. Otro tipo de apocalipsis que nos genera angustia, depresiones, tristeza, miedo…
Yo soy un lector de la Biblia, muy respetuoso, pero me gusta el relato de los Libros Sagrados adaptado al tiempo actual. Y como médico, evidentemente me interesan los temas sociales de sanidad. Lo que en tiempos bíblicos hablaban de caballos ahora hablarían de vehículos militares, de tanques y de aviones, drones y bombas. Creo que el caballo blanco serían tanques y escopetas y otros utensilios. El caballo rojo son los heridos, amputaciones, cuidados sin anestesia. El caballo negro son los muertos. Fosas comunes, tumbas de desconocidos y cadáveres amontonados por la calle.
Los caballeros son los mandos, los generales y los dictadores como Putin y Netanyahu. Hay mucha maldad. Esto provoca pánico, fobia social, trastorno obsesivo-compulsivo, estrés postraumático, ansiedad reactiva. Desplazados, migrantes, sin techo, campos de refugiados, violaciones, robos, edificios destruidos, hospitales llenos de heridos, psicopatías, angustia, personas desplazadas sin nada, violencia. Los supervivientes campos de trabajo nazi, después de 50 años, manifiestan memorias de sueño negativas de malos tratos.
El niño refugiado, sin culpa alguna, tiene muchos factores de riesgo, fatiga, deshidratación, hambre, anemia, tristeza, resfriados, falta de vacunas, malnutrición, avitaminosis, diarreas y otras infecciones, peleas con otros niños. Lo que ahora sufre tendrá un impacto de amargura y pesadilla de por vida. Suponiendo que pueda salir vivo de esa situación. Existe una gran mortalidad de niños y mujeres.
La batalla de Armagedón es una lucha muy interesante del cordero contra el mal. Es muy simbólica la descripción. En su esquema de seis trompetas podemos ver la explosión del Sol y la Tierra en la oscuridad. Impacto contra la tierra por meteoritos, estrellas más grandes. El fuego extendido de los volcanes y terremotos. Calentamiento climático y aguas que invaden la Tierra. Pandemias. Los virus mutan y no llegan vacunas o medicamentos. Es terrible todos los muertos. Bombas, misiles y drones.