Aldo Olcese
Presidente de la Fundación Independiente y de la Asociación Nacional Sociedad Civil Ahora, académico de número de la Real Academia de Ciencias Económicas y Financieras y académico de número y vicepresidente de la Real Academia Europea de Doctores-Barcelona 1914 (RAED)
Aldo Olcese, presidente de la Fundación Independiente y de la Asociación Nacional Sociedad Civil Ahora, académico de número de la Real Academia de Ciencias Económicas y Financieras y académico de número y vicepresidente de la Real Academia Europea de Doctores-Barcelona 1914 (RAED), presidió el pasado 2 de diciembre la entrega del reconocimiento como Español Universal 2021 que concede la Fundación al expresidente del Gobierno Felipe González durante una solemne ceremonia que se celebró en el Casino de Madrid. Al acto acudieron destacadas personalidades de la vida pública española, entre ellas la ministra de Ordenación del Territorio y portavoz del Gobierno, Isabel Rodríguez.
Olcese destacó la calidad humana y política de quien ocupó la presidencia del Gobierno entre 1982 y 1996, asumiendo importantes retos pendientes de la transición, así como el ingreso de España en la Unión Europea. «Figuras como la de Felipe González nos permiten tener esperanzas en vivir en una sociedad mejor y de mayor consenso». Asimismo, resaltó su «patriotismo del siglo XXI» y su talla de estadista.
Felipe González, por su parte, explicó numerosas anécdotas y experiencias de su vida política. «No crean que voy a darles un discurso muy estructurado -inició su intervención-. El nuestro es un gran país. En los últimos años nos hemos ido acatetando, cada vez nos miramos más el ombligo y nos estamos complicando la vida. Cada vez se pone más difícil ser político. El político es una persona presuntamente culpable. Lo que importa es la nobleza del empeño y la eficacia de ese empeño para resolver los problemas. Los políticos tienen la difícil tarea de resolver las dudas con la almohada para no trasladar las incertidumbres a los ciudadanos». Sobre la transición y su revisionismo fue explícito: «No quiero olvidar lo que pasó, pero no quiero relacionarme con los malos del rencor. Preferimos ser hijos de la democracia que nietos de la Guerra Civil».
En reconocimiento de la figura de González intervino el expresidente de Colombia Juan Manuel Santos, quien agradeció haberlo conocido en la Cumbre Iberoamericana de 1992, cuando asistió en representación del presidente César Gaviria, quien se vio imposibilitado a acudir a nuestro país tras la huida de la cárcel del narcotraficante Pablo Escobar. «Nos unía y nos sigue uniendo una visión liberal pragmática sobre las cosas de la vida y la política. Me atrevo a decir que ningún otro gobernante español ha estado tan presente y ha tenido tanta influencia en nuestra región, ni tampoco haya sido apreciado tanto y haya tenido tan claros los vínculos de España con las Américas. Contamos con sus consejos serenos y moderados durante la negociación con las FARC. Es un hombre sabio, un ser humano generoso y noble», afirmó.
Felipe González contó con la felicitación y el testimonio, a través de breves vídeos, del presidente del Gobierno, Pedro Sánchez; el expresidente de Chile entre 2000 y 2006, Ricardo Lagos, y el que fuera primer ministro italiano y presidente de la Comisión Europea, Romano Prodi. «Hay muy pocas personas que merezcan más este reconocimiento de Español Universal que Felipe González -dijo Pedro Sánchez-. La España que hoy conocemos, la España moderna, plenamente democrática, enraizada en el corazón de Europa, no puede entenderse sin Felipe González y el liderazgo de sus gobiernos. Supo también trabar grandes consensos con sus adversarios políticos sembrando un ejemplo que siempre hemos seguido todos aquellos que pertenecemos al Partido Socialista«.