José Antonio González, vicepresidente del Colegio de Censores Jurados de Cuentas de Cataluña y colaborador de la Real Academia Europea de Doctores-Barcelona 1914 (RAED), presenta a la comunidad académica las conclusiones de la sesión que moderó durante la Jornada sobre Información no Financiera, organizada por el propio Colegio y la RAED el pasado 2 de diciembre con el título «Tendencias internacionales sobre informes de sostenibilidad». En ella participaron Jordi Martí, profesor de Economía y Contabilidad de la Universidad de Barcelona y académico de número y miembro de la Junta de Gobierno de la RAED, Carlos Cerdán, director de Responsabilidad Social Corporativa y Sostenibilidad en RSM, y Laura Gómez, consultora de Sostenibilidad y Riesgos en Deloitte.
Tendencias internacionales sobre informes de sostenibilidad
La información no financiera constituye un aspecto muy relevante en relación con la demanda creciente de transparencia por parte de la sociedad para reforzar la confianza en las informaciones facilitadas por las empresas. Hoy en día constituyen temas sensibles para la sociedad: las cuestiones sociales, de gestión de las personas, los temas medioambientales, los derechos humanos, la lucha contra la corrupción y el soborno. En muchos casos la información no financiera es más relevante que la financiera para los grupos de interés. Por poner algún ejemplo pensemos en gestores de escuelas, hospitales, centros asistenciales, universidades…
En este contexto de continua transformación los inversores han comenzado a incorporar la preocupación por los aspectos sociales, medioambientales, éticos y de buen gobierno que afectan a las empresas, lo que han dado en llamar aspectos ESG (Environmental, Social and Governance). El mundo financiero y los mercados de capitales se muestran cada vez más sensibles y activos a la hora de valorar los aspectos ESG e incorporarlos en su gestión.
Para el futuro de las empresas, resultan esenciales dos transformaciones de su modelo de negocio: la transformación tecnológica, asociada a la digitalización; y la aceptación de su responsabilidad social, asociada al desarrollo sostenible, tal como los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS), promovidos por la Agenda 2030 de la Organización de las Naciones Unidas (ONU), los definen.
La atención a las cuestiones que recoge el estado de información no financiera (EINF) establecido de forma obligatoria por los gobiernos para determinadas empresas como respuesta a directivas europeas, es esencial para la eficiencia y la sostenibilidad de las empresas, más allá de las consideraciones respecto del compromiso ético y social de estas. Más allá del capital financiero, otros capitales son esenciales para la sostenibilidad y el desarrollo de las empresas, tales como el capital natural, el humano, el intelectual, o el social y relacional. La normativa por la que se introduce el EINF va más allá de la Responsabilidad Social Empresarial (RSE). Otorga a la información de lo que ocurre en relación con temas como los aspectos sociales y medioambientales, la categoría de bien público, de forma que, en aras del interés general, las empresas deben informar sobre estos temas, así como someter a verificación dichos informes.
IFAC, Aicpa & Cima y Audit Analytics publicaron en junio de 2021 un estudio sobre la situación del aseguramiento de la información sobre sostenibilidad. Este estudio ha analizado a 1.400 empresas de todo el mundo y ayuda a comprender mejor hasta qué punto las empresas están informando y obteniendo un grado de seguridad sobre la información en materia de sostenibilidad que publican, qué normas de aseguramiento se están utilizando y qué empresas están proporcionando el servicio de aseguramiento. En este informe se pone de manifiesto que un 91% de las empresas revisadas publican cierto grado de información en materia de sostenibilidad. El 51% de las empresas que publican información en este ámbito obtienen un cierto grado de seguridad sobre ella y el 63% de estos encargos de aseguramiento los llevó a cabo una firma de auditoría. Se considera imprescindible que este tipo de información se encuentre verificada externamente con el objetivo de asegurar su fiabilidad y generar confianza a las partes interesadas de la entidad en esta información.
En 2019 se presentó el Pacto Verde Europeo. Se considera una herramienta de lucha contra el cambio climático, lanzada por la Unión Europea, que pretende que Europa sea, en 2050, el primer continente climáticamente neutro. La Comisión Europea ha presentado una propuesta de revisión de la directiva de Información No Financiera para las bases de la inversión sostenible en la UE. La propuesta consiste en una directiva de reporte corporativo en sostenibilidad. Está pendiente de aprobación en el Parlamento y el Consejo. Se espera la transposición en España en el año 2022 y que se aplique a los informes referidos en 2023.
Una de las novedades más significativas es la aprobación en el año 2020 por parte de la Comisión Europea de la taxonomía de las finanzas sostenibles con el objetivo de actuar como filtro para la canalización de los flujos de capital hacia las actividades económicas sostenibles, en base a criterios de selección e indicadores para fomentar las inversiones necesarias en el seno de la UE para establecer una economía neutra en carbono, resiliente y sostenible.
El Grupo Asesor Europeo de Información Financiera está trabajando en la adopción de estándares de reporte normalizados. El Foro Económico Mundial está desarrollando métricas comunes y divulgaciones coherentes con la creación de valor sostenible. Otras entidades como Integrated Reporting, Global Reporting Initative o International Financial Reporting Standars están trabajando en un desarrollo de un sistema global y completo de «reporting».
Los riesgos ESG cada vez tienen mayor probabilidad de ocurrencia y mayor impacto por lo que es imprescindible gestionarlos adecuadamente por parte de las empresas. Por otro lado, los financiadores e inversores están apostando por la sostenibilidad por lo que es imprescindible gestionar e informar en este ámbito. En el transcurso de la sesión también se puso de manifiesto que las universidades están incluyendo en sus planes de estudio materias relacionadas con la sostenibilidad. Este hecho es fundamental para la formación de profesionales en este ámbito.