Josep Maria Bové insta al Gobierno español a adoptar un plan de capitalización del sistema de pensiones similar al del país alpino
Josep Maria Bové, académico de número de la Real Academia Europea de Doctores-Barcelona 1914 (RAED), cónsul general honorario de Austria para Cataluña y Aragón y presidente de Bové Montero y Asociados, una de las principales firmas españolas en el campo de la auditoría y la consultoría, urge al Gobierno a implementar un plan de capitalización del sistema público de pensiones similar al popularmente conocido como la mochila austríaca por su efectiva implantación en este país centroeuropeo. El académico defiende esta tesis en un artículo publicado por el suplemento económico «Dinero» del diario «La Vanguardia» en su edición del pasado 24 de febrero.
«Si bien el Gobierno español admite que estudia la posible implantación de un fondo de capitalización individual orientado hacia la jubilación, la ‘mochila austríaca’, fuentes gubernamentales ya han indicado que no es una prioridad y que es necesario un debate a largo plazo. Con humildad, discrepo: sí es una prioridad toda iniciativa que contribuya a la sostenibilidad del sistema público de pensiones», inicia Bové su reflexión. Datos en mano, el académico considera que el Estado huye de un problema estructural que ningún gobierno ha querido o ha sabido afrontar. «Se trata del déficit de la Seguridad Social, que alcanzará los 18.650 millones de euros en 2019», especifica.
Para Bové, el sistema austríaco no sólo permitiría a España reducir ese déficit galopante, sino que garantizaría la viabilidad del actual sistema público de pensiones y minimizaría las tensiones que se producen en el actual sistema español en coyunturas económicas o laborales desfavorables. «Los datos evidencian que el modelo austríaco tiene efectos incentivadores en materia de contratación: en junio de 2008 la tasa de desempleo en España era del 10,4%, frente al 3,7% en Austria; en marzo de 2013, la cifra se incrementó en España hasta el 26,9%, mientras que en el país centroeuropeo era un 5,7%; y en diciembre de 2018, España, 14,3%, y Austria, 4,7%. En coyunturas económicas adversas, el sistema se tensiona en gran manera por la pérdida de cotizantes (que además pasan a cobrar el desempleo), inconveniente que se minimiza en el país alpino», explica el académico.
Bové concluye que tras el fracaso del Fondo de Reserva, la popularmente conocida hucha de las pensiones, se impone un cambio de modelo. «Lo dicho: frente a parches e improvisaciones, prioridades».