Francisco González de Posada, catedrático de Fundamentos Físicos de la Universidad Politécnica de Madrid y académico de honor de la Real Academia Europea de Doctores-Barcelona 1914 (RAED), participó entre los pasados 16 y 18 de marzo en las VIII Jornadas de Católicos y Vida Pública de Cantabria, que organizó la Asociación Católica de Propagandistas. Las sesiones se celebraron en el salón de actos del Archivo Catedralicio y Diocesano de Santander bajo el título «Cantabria y el invierno demográfico: impactos, retos, propuestas». También participaron en los debates los expertos Elio Gallego, miembro de la comisión ejecutiva del Congreso Católicos y Vida Pública; Manuel Sánchez, obispo de Santander; Rafael Puyol, presidente de la Universidad en Internet-UNIR, catedrático de Geografía Humana y exrector de la Universidad Complutense de Madrid; Alejandro Macarrón, coordinador del Observatorio Demográfico de la Universidad San Pablo-CEU; Rubén Calderón, rector de la Universidad Europea del Atlántico; Manuela Contreras, matrona; Rocío Gómez, experta en sexualidad y naprotecnología, y José Luis Bosque, representante de la Delegación Diocesana de Familia y Vida.
«Frente a la juventud de los países africanos y de la América española, la vieja Europa atraviesa por un invierno demográfico, caracterizado por la drástica reducción de su tasa de natalidad y del índice de fecundidad, así como por un acelerado envejecimiento de su ciudadanía. Esta situación afecta gravemente a España y, dentro de ella, en especial a nuestra comunidad autónoma de Cantabria. Su actual tasa de natalidad resulta pírrica y, desde décadas atrás, el índice de fecundidad se sitúa muy por debajo del valor mínimo de reposición. Los nacimientos son ya bastantes menos que los decesos, lo que implica un crecimiento vegetativo negativo. De forma que los jóvenes escasean, mientras que las personas mayores ya representan la mayoría de la población. Si esta tendencia persiste, entonces los motores del progreso socioeconómico de nuestro estado de bienestar corren el riesgo de naufragar. A no ser que, en un corto plazo se apliquen medidas correctoras a este declive poblacional, que de no reconducirse producirá un suicidio demográfico», concluyeron los participantes.
González de Posada trazó durante su intervención un recorrido social y religioso sobre algunos temas ligados a la demografía, como la defensa de la vida. «Hay que defender la vida entera, y la vida significa acoger a todo el que lo necesita», insistió. El académico de honor de la RAED fue rector de la Universidad de Cantabria entre 1984 y 1986, adonde llegó tras conseguir en 1977 la Cátedra de Fundamentos Físicos de las Técnicas de la Escuela de Ingenieros de Caminos de la Universidad de Santander. En ese período, impulsó dos instituciones fundamentales de la ciudad y la Comunidad de Cantabria: la Fundación Marcelino Botín y la Fundación Santillana, además de otra iniciativa que resultaría fundamental para la fundación de la nueva universidad: la Villa Universitaria de Verano de Laredo.
González de Posada es ingeniero y doctor de Caminos, Canales y Puertos por la Universidad Politécnica de Madrid, licenciado en Filosofía y Letras por la Universidad Pontificia de Salamanca y licenciado en Ciencias Físicas por la Universidad Complutense de Madrid. Poseedor de ocho doctorados, ha impulsado y dirigido numerosos proyectos y estudios de diversas ramas del saber. Fue reconocido con la Medalla de Honor al Fomento de la Invención.
Es académico de número de la Real Academia Nacional de Medicina de España, de la Real Academia de Doctores de España y miembro de la Academia Mundial de Artes y Ciencias, académico correspondiente de la Real Academia de Bellas Artes de Cádiz, de la Real Academia de Bellas Artes de San Fernando y la Real Academia de Ciencias, Bellas Artes y Buenas Letras de Écija y académico de honor de la Academia de Ciencias Médicas de Cantabria, de la Real Academia de Cultura Valenciana, de la Real Academia de Medicina y Cirugía de Cádiz y de la Real Academia de Medicina de Canarias. Preside la Academia de Ciencias e Ingenierías de Lanzarote.