Oriol Amat inaugura el curso académico de la Escuela de Auditoría del Colegio de Censores Jurados de Cuentas de Cataluña
Oriol Amat, catedrático de la Barcelona School of Management de la Universidad Pompeu Fabra, expresidente y fundador de la Asociación Catalana de Contabilidad y Dirección y académico de número y miembro de la Junta de Gobierno de la Real Academia Europea de Doctores-Barcelona 1914 (RAED), pronunció el pasado 17 de septiembre el discurso de inauguración del curso académico 2019-2020 de la Escuela de Auditoría del Colegio de Censores Jurados de Cuentas de Cataluña. Un acto en el que también intervino Alfredo Rocafort, académico de número y presidente de la Junta de Gobierno de la Real Academia. La sesión estuvo encabezada por el presidente del Colegio, Antoni Gómez, que anunció un nuevo Plan Estratégico para la Escuela más allá del horizonte del 2020.
En una charla donde abordó el presente y el futuro de la economía catalana, Amat destacó la resiliencia del tejido empresarial catalán ante la desaceleración económica mundial y defendió que, a pesar de las numerosas turbulencias internas y externas, las empresas han salido reforzadas de la crisis económica y que 2019 puede ser un buen año en términos de evolución económica para Cataluña. El académico sustentó su diagnóstico en una serie de indicadores que, en su opinión, permiten ser optimista. En esta línea precisó que la economía catalana puede cerrar 2019 con un crecimiento del PIB de entre el 2,1% y el 2,2%, una circunstancia positiva «porque todo crecimiento superior al 1% supone la creación de puestos de trabajo».
Amat indicó que durante el periodo 2007-2018 la intensidad exportadora de las empresas catalanas creció entre un 19% y un 30%, y que si en 1995 las ventas al exterior se desglosaban entre un 63,5% al resto de España y un 36,5% al resto del mundo, en 2018 se invirtieron los términos de forma significativa y las exportaciones ya supusieron un 64,6%. Asimismo, precisó que la rentabilidad empresarial sobre capital invertido alcanzó el 14% en 2018, que el número de empresas en el periodo 2014-2018 creció un 7,4% y que el peso del sector industrial en Cataluña fue de un 20,3% en 2018. «Un dato positivo que denota una economía bien diversificada», señaló.
Como aspectos negativos, Amat habló de la falta de inversión en I+D y las incertidumbres derivadas del actual clima político, junto a un porcentaje de población en riesgo de pobreza. Al referirse a las cifras de paro, el economista y auditor sostuvo que Cataluña se acerca al umbral de paro técnico, que sitúa en torno al 6% y que explica por la existencia de la economía sumergida. Y vio en el Brexit una oportunidad más que un problema. «Las negociaciones en el marco de los países miembros de la Unión Europea serían más sencillas en ausencia de Reino Unido. En aspectos relacionados con cuál debe ser el papel del Estado o en materia de burocracia son demasiadas las cosas que separan al Reino Unido del resto de sus todavía socios comunitarios», concluyó.
Rocafort, por su parte, abordó la importancia de la relación entre el mundo académico con los profesionales e hizo referencia a la labor que realiza la institución que preside, que firmará próximamente un convenio de colaboración con el Colegio de Censores Jurados de Cuentas de Cataluña para desarrollar actividades y proyectos conjuntos.