Frederic Borràs presenta el estudio «¿Estamos preparados para la próxima crisis?»
Frederic Borràs, reconocido auditor y académico correspondiente de la Real Academia Europea de Doctores-Barcelona 1914 (RAED), presenta el estudio «¿Estamos preparados para la próxima crisis?», en el que detalla los retos de la auditoría y de la información financiera y su gestión para prevenir futuras crisis como la que asoló a la economía global a partir de 2008 tras la quiebra de Lehman Brothers o el siempre recurrente Crack de 1929.
«El objetivo de este trabajo es analizar las mejoras que se han realizado en la normativa sobre la información financiera y la auditoría desde la crisis, así como señalar en qué proyectos se está trabajando a nivel internacional actualmente, indicando aquellos aspectos de mejora a considerar teniendo en cuenta la importancia de disponer de una adecuada información financiera para lo que es imprescindible una buena normativa que la regule, así como unas normas de auditoría que den fiabilidad sobre dicha información a sus usuarios y terceros interesados. De hecho hay una constante histórica que nos dice que la normativa de auditoría evoluciona de forma significativa cuando se producen crisis como pasó con la de 1929 en Estados Unidos que originó la auditoría obligatoria para las empresas cotizadas, como medida necesaria para poder disponer de una información financiera fiable», señala el propio autor en la introducción a su trabajo.
Exsocio de KPGM, presidente del consejo asesor de Morera Asesores & Auditores y miembro del consejo de administración internacional de IECnet, Borràs repasa todos los avances y el camino que ha iniciado la auditoría aprendiendo de sus errores para llegar a la pregunta que da título a su estudio: ¿estamos preparados para la próxima crisis? En este sentido, el académico señala que la nueva auditoría debe dar respuesta al nuevo entorno tecnológico: el icloud, la inteligencia artificial, la robótica, el Big Data, blockchain… Este nuevo escenario requiere una auditoría diferente, porque la normativa actual está basada en riesgos y muestras, aunque hoy en día la tecnología permite incorporar el análisis de la información que se genera fuera de la empresa.
«Hay que pedir un esfuerzo adicional hacia una auditoría predictiva: la sociedad pide que el auditor mire más al futuro y no acepta que una empresa con un informe de auditoría favorable colapse o tenga problemas serios de viabilidad en un periodo de tiempo razonable, por lo que habrá que desarrollar nuevas técnicas para avanzar en este camino con las luces largas, con procedimientos que puedan representar seguridad adicional para los usuarios de la información financiera», concluye el autor.