Bernardo Rabassa, presidente de honor y de Relaciones Exteriores del Club Liberal Español, presidente de la Fundación Instituto Europeo para la Comunicación Social y colaborador de la Real Academia Europea de Doctores-Barcelona 1914 (RAED), ha presentado la obra autobiográfica «Memorias de mi vida liberal. De Franco a Felipe VI», donde repasa su intensa vida política desde la dictadura a la transición, el retorno a la normalidad democrática y la actual crispación partidista. Todo ello a partir de un relato ágil construido desde la memoria que se extiende a lo largo de más de 500 páginas. Rabassa fue fundador del Partido Liberal y de Unión de Centro Democrático (UCD), es miembro de Alianza Liberal Europea y entre los reconocimientos que ha recibido a lo largo de su trayectoria profesional y personal destacan el Premio 1812, el Premio Ciudadano Europeo y la Medalla al Mérito Cultural de la Real Liga Naval Española.
«No sé si a mi lector le será de utilidad el hecho de que le cuente como fue el ascenso de mi escalera, pero no tengo otra que ofrecerle, contemplada desde el otro lado del espejo, desdibujada y transformada para engañar su ilusión, para darle un día o unas horas más de vida, para motivarle a seguir subiendo tramos, para evitar que caiga en depresión y en el sentimiento posmoderno del hastío y del cansancio. No busque, sin embargo, en esta obra, el camino a la felicidad, ya que este no existe. Debe comprender que el subir tramos de escalera satisface. Las endorfinas llenan su sangre, pero esta felicidad de consecución es efímera, es de corto vuelo como el de la perdiz, aunque tan rápida como ella, y difícil de derribar, sin adelantar el tiro, el problema es calcular su orientación, dirigir la escalera como si de la de los bomberos se tratara, aunque aquí no se trata de alcanzar a nadie, solo de seguir subiendo y subiendo, en un entorno hostil y competitivo, es la carrera por la vida, para llegar al inmenso mar que nos devorará como a todo ser humano, creado por la aleatoriedad de la evolución», explica el autor en la presentación de la obra.
El autor señala cómo reconstruyó sus vivencias con apenas apuntes de ellas hasta el año 2005, cuando empezó a escribir mes a mes los detalles más importantes de su vida. Y cómo se planteó hacer memoria y reescribir con paciencia sus recuerdos a partir del año 2018, que también se puso como fin de su historia. De hecho, asegura, pudo serlo, ya que una angina de pecho estuvo a punto de costarle la vida en ese momento. «La conciencia de esa potencial muerte me deja bastante frío, pues creo haber vivido ya lo suficiente, y así pues solo queda para solazarme la tremenda memoria que me acompaña. Conviene, pues, el ejercicio intelectual de escribir sobre los temas más variados, aunque estemos en los tiempos de la Covid 19», señaló aún en plena escritura de unas memorias que ya están en la calle.