Josep Prim Capdevila, doctor en Medicina y Cirugía, ingresó como académico de número de la Real Academia Europea de Doctores-Barcelona 1914 (RAED) durante una solemne sesión que se celebró en la Sala de Actos de Fomento del Trabajo, sede de la Real Corporación, el pasado 19 de septiembre. El acto pudo seguirse tanto de forma presencial como en streaming a través el canal de YouTube de la RAED, donde puede visionarse. El recipiendario leyó el discurso de ingreso «El Dr. Manuel Corachan Llort, pionero en la neurocirugía», un amplio y documentado estudio sobre la trayectoria de quien está considerado el padre de la neurocirugía en España. Le respondió, en nombre de la Real Academia, el académico numerario Fernando Martínez-Pintor.
El nuevo académico presentó la figura de Manuel Corachan Llort y su papel como impulsor de una especialidad que nació a principios del siglo XX gracias a la incipiente especialización de la cirugía. En este contexto, y ante los avances médicos y creación de centros pioneros que se dio en la época en Barcelona, emergió la figura del experto. «La incipiente neurología vio necesario extraer un tumor craneal y buscaba a los cirujanos generales para ello, lo que hizo que, poco a poco, los jefes de servicio de cirugía, designaran a alguien de su equipo que por inclinación propia o por consejo de ellos, se dedicaran exclusivamente a la neurocirugía como especialidad», introdujo el Prim Capdevila su disertación.
Tras enumerar los valiosos antecedentes familiares de Corachan Llort, fundamentales para su formación e introducción en la novedosa especialidad, el recipiendario esbozó la trayectoria académica y facultativa de este precursor de la neurocirugía hasta llegar a los servicios de Cirugía y Neurología del Hospital de la Sant Creu i Sant Pau de Barcelona, un punto de inflexión en su carrera. «A pesar de que colabora en intervenciones y publicaciones del Servicio de Cirugía General del Hospital de Sant Pau ya inicialmente, a la vuelta de su época de formación, en 1933, interviene y publica exclusivamente en neurocirugía. Corachan Llort ya intervenía en casos de cirugía neurológica antes de sus viajes de formación, pero podemos considerar que es al regreso de los mismos -ese 1933- en que se dedica exclusivamente a la neurocirugía», puntualizó el académico.
«Corachan Llort, gracias a su inteligencia, a su formación y a su capacidad técnica, logró resultados satisfactorios en la evolución de los enfermos intervenidos. Siguió las pautas que su padre creía modélicas e imprescindibles para un buen cirujano. Se preocupó de todas las etapas del proceso quirúrgico y sobre todo en su época, en que las afecciones, por desgracia, llegaban al servicio muy evolucionadas y con sintomatología muy expresiva, lo que daba muchas menos posibilidades de curación. Mostró preocupación por la evolución posquirúrgica y el tratamiento que emplear en el edema cerebral, en controlar el líquido cefalorraquídeo y en evitar las complicaciones sépticas. Finalmente, estudió el resultado anatomopatológico en el caso de tumores cerebrales o raquídeos», expuso Prim Capdevila.
El nuevo académico es miembro de la Academia de Ciencias Médicas de Cataluña y de Baleares, de la Sociedad Catalana y Española de Neurocirugía, de la Sociedad Catalana de Neurología, de la Sociedad Española de Historia de la Medicina, de la Asociación Médico-Quirúrgica de Lleida, de la Sociedad Española del Dolor, de la Sociedad Catalana de Cirugía, de la Asociación Catalana de Paleopatología y de Sociedad Española de Neuro-Raquis.
Facultativo de Servicio de Neurocirugía de la Clínica Corachan de Barcelona, ha ejercido a lo largo de su extensa carrera profesional en el Servicio de Neurocirugía del Hospital Germans Trias i Pujol de Badalona, el Instituto Dexeus de Barcelona, el Hospital General de Cataluña y el Hospital de Mar de Barcelona. Ha sido médico coordinador del Servicio de Neurocirugía del Centro Médico Teknon de Barcelona y jefe del Servicio de Neurocirugía del Hospital del Sagrat Cor de Barcelona.