Oriol Amat
Decano de la Barcelona School of Management de la Universidad Pompeu Fabra, decano del Colegio de Economistas de Cataluña, vicepresidente de la Asociación Catalana de Contabilidad y Dirección y académico de número de la Real Academia Europea de Doctores-Barcelona 1914 (RAED)

Entrevista publicada por el diario digital Via Empresa el 14 de marzo de 2021

Oriol Amat, decano de la Barcelona School of Management de la Universidad Pompeu Fabra y del Colegio de Economistas de Cataluña y académico de número de la Real Academia Europea de Doctores-Barcelona 1914 (RAED), muestra su optimismo ante la recuperación económica en una entrevista publicada por el diario digital Via Empresa el pasado 14 de marzo, si bien advierte que las administraciones deben implicarse mucho más en el proceso y, sobre todo, poner mucho más recursos, tanto monetarios como fiscales, sobre la mesa.

Dr. Oriol Amat Salas

Dr. Oriol Amat

«Si comparamos la gestión de esta crisis con la de 2008, la valoración es mucho más positiva. Ahora bien, tenemos temas estructurales y seguramente no hay la suficiente química y empatía entre población y gobernantes, del mismo modo que no hay empatía entre gobernantes y oposición. En los países que tienen más empatía entre gobernantes y población, como Nueva Zelanda o Alemania, les ha ido mejor durante esta crisis por la confianza mutua, por ejemplo. Este es un tema estructural que no nos favorece -reflexiona el académico-. Con las herramientas que tiene la Generalitat no sería fácil hacer muchas cosas más. Por ejemplo, esta es una crisis en la que se tiene que poner dinero sobre la mesa. La Generalitat ha puesto encima de la mesa todo el dinero que ha podido y diría que seguramente no puede poner más porque necesita la autorización del Gobierno del Estado para aumentar el límite de déficit. El Gobierno ha puesto mucho dinero, pero puesto que tiene las competencias y la capacidad de endeudarse, ahora tiene que poner mucho más».

Para Amat, el fin último de la economía, y en este caso concreto de la recuperación, debe ser el bienestar social, por delante de cualquier parámetro macroeconómico. «El objetivo de la economía no es ni el PIB, ni el déficit, ni la inflación. Para mí, el objetivo de la economía es el bienestar de la gente, que quiere decir que tenga trabajo, una retribución digna que te permita vivir dignamente y tener salud. Si tenemos que elegir entre economía y salud, elijo salud, pero sin perder de vista la economía. A los países que han primado la salud les ha ido mejor durante esta crisis. Sería inadmisible decir que para que a las empresas les vaya mejor tienen que morir un millón más de personas… Una sola vida tiene que pasar por delante», afirma.

El académico y decano del Colegio de Economistas se reitera en su tesis de la recuperación en forma de K e insiste en la necesidad de que la economía española apueste definitivamente por la innovación aprovechando los fondos europeos y las políticas comunes de recuperación. «Aquellos que están en Internet, el teletrabajo, la sostenibilidad… Son sectores que están ganando. Por eso decía que la crisis tiene forma de K. Si miras las acciones de Zoom, Teams o Amazon, van hacia arriba. Los más ricos ganan más y también los que están en sectores emergentes. En cuanto a la innovación, en 2008 ya no estábamos muy bien. Con una transformación tecnológica como la que estamos viviendo, tienes que poner dinero en I+D. Al no hacerlo, baja la productividad, el valor añadido de las empresas y los salarios. Vamos con retraso. Incluso Portugal ha ido aumentando. La I+D pública no ha bajado mucho, la que ha bajado es la privada que son las empresas», añade.

Sobre los retos de su mandato al frente del Colegio de Economistas, Amat habla de cerrar bien una etapa convulsa. «Teníamos que cumplir el compromiso de liderar medio mandato Anton Gasol y el otro medio yo, porque era lo que dijimos cuando nos presentamos, aunque la pandemia ha trastocado los planes. Tenemos 7.600 colegiados y la economía es una ciencia muy amplia y tenemos desde profesores universitarios, hasta gente que se dedica a la economía urbana, a la economía de la administración pública, asesores fiscales, auditores… El Colegio tiene muchas misiones. Una de estas es dar servicio a todos estos colectivos y también hay momentos en que da opinión, información y genera conocimiento», concluye.

 

Leer la entrevista