Rosalía Arteaga, expresidenta y exministra de Educación de Ecuador, presidenta de la Fundación para el Desarrollo de América Latina, reconocida activista por la educación y la infancia y académica de honor y miembro del Senado de la Real Academia Europea de Doctores-Barcelona 1914 (RAED), participó el pasado 3 de febrero en la ciudad india de Nueva Delhi en el encuentro internacional del movimiento Protect Our Planet, donde presentó la ponencia «Mañana es el primer día del resto de nuestras vidas: fraternidad humana, seguridad humana, amor, compasión y paz». En el marco de esta cita recibió el Premio Icono del Clima, que le había sido otorgado en el año 2022.
Protect Our Planet es una iniciativa diseñada para abordar la urgente necesidad de compartir información y conocimientos con los jóvenes sobre soluciones para mitigar el cambio climático. Este último encuentro internacional se llevó a cabo con el objetivo de crear oportunidades intergeneracionales y multisectoriales para promover la acción climática y construir una determinación colectiva para alcanzar los Objetivos de Desarrollo Sostenible de las Naciones Unidas. La cita se centró en temas de importancia global, como: el clima, la salud, el uso de la tecnología en la acción climática, el papel de las mujeres en liderazgo sostenible, y la equidad y justicia. En el evento participaron distinguidas personalidades como Ban Ki-moon, exsecretario general de las Naciones Unidas; Negoslav Ostojić, director ejecutivo del Centro Europeo para la Paz y el Desarrollo de la Universidad para la Paz de Serbia; José Ramos-Horta, ganador del Premio Nobel de la Paz en 1996 y presidente de Timor Oriental, y Terry Tamminen, vicepresidente del Foro Mundial sobre Desarrollo Sostenible, entre otros.
«Cuando las cosas se miran oscuras y llenas de incertidumbres, cuando el futuro aparece lleno de negros de nubarrones, es cuando se aprecian más los destellos de luz, aquellos que iluminan y hacen ver los reales colores y las cosas positivas. Esto es lo que acaba de suceder conmigo, cuando en el corazón de Nueva Delhi asistí invitada esta semana a la conferencia internacional y al festival Protect Our Planet por la Acción Climática 2024, una iniciativa liderada por Ash Pachauri, un joven carismático, que mueve voluntades y conjuga esfuerzos para enfrentar el cambio climático a través del accionar de los jóvenes», explicó la propia Arteaga en un artículo publicado el pasado 8 de febrero en el diario ecuatoriano «La Hora».
La académica de honor destaca el dinamismo e ilusión de este movimiento y su capacidad para llegar a los jóvenes, que serán los más afectados por el descalabro causado por la acción humana en el clima de la Tierra. «Su llamada llega a muchos lugares del planeta, donde se activan sus integrantes para producir una mayor movilización social, pero también actuar de manera conjunta o individual para sembrar árboles, limpiar los ecosistemas contaminados, convencer a los otros, empezando por sus propias familias y amigos para ser cuidadosos con las acciones que ejecutamos para impactar de la manera menos estrepitosa sobre el ambiente», concluye Arteaga.
A lo largo de más de dos décadas, Arteaga ha liderado transformaciones en el campo de la educación y la cultura en Ecuador. Además de ser ministra de Educación, se ha destacado por su liderazgo en temas educativos desde la sociedad civil, su compromiso con la democracia, la sostenibilidad ambiental y su capacidad para identificar problemas y diseñar iniciativas innovadoras, para generar un impacto social que el actual modelo de enseñanza online potenciado por la pandemia ahora favorece. La académica reforzó esta imagen tras su candidatura a la Secretaría General Iberoamericana, organización creada en el año 2003 que agrupa los 22 países que conforman la comunidad iberoamericana, y a la Secretaría General de la Organización de las Naciones Unidas a propuesta de la organización juvenil Forward. Una candidatura popular que la ONU no llegó a formalizar pese a que prevé este tipo de iniciativas en sus reglamentos, pero que permitió a la académica de honor reivindicar el papel de la sociedad civil y más en particular de la juventud iberoamericana.