Enrique Sada

El historiador mexicano Enrique Sada, colaborador de la Real Academia Europea de Doctores-Barcelona 1914 (RAED), reflexiona sobre el pasado y el presente de México en los artículos «La Virgen de la Begoña: rescate histórico en la Nueva Bilbao», «Un hombre de palabra», «¿Y en dónde quedó el Fonden y «La memoria histórica de la Virgen de Begoña en Viesca«, publicados en el portal El Siglo de Torreón entre los pasados 12 y 28 de octubre.

En «La Virgen de la Begoña: rescate histórico en la Nueva Bilbao», el experto se felicita por los trabajos de restauración de esta imagen sagrada. «Escribir sobre la historia de la Nueva Vizcaya es escribir también sobre la historia del norte de México, partiendo de la importancia que esta enorme región supuso en su momento para la consolidación y forja del Virreinato de la Nueva España -desde el siglo XVI hasta el siglo XVIII- tanto por sus alcances territoriales como por la riqueza de su suelo. En este mismo tenor, hablar de la historia de la Laguna de Durango y de Coahuila implica en buena medida el rescate de la memoria de aquellos hombres y mujeres que, nacidos en este mismo suelo o venidos desde el otro lado del Atlántico, contribuyeron para hacer de esta región un sitio próspero y civilizado para goce de futuras generaciones», señala.

Por su parte, en «Un hombre de palabra», Sada reflexiona sobre los primeros cien días del actual mandato del presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, partiendo de uno de sus mensajes de campaña, que contrasta con sus incumplimientos. «Si algo ha patentado desde sus primeros cien días de Gobierno hasta la fecha ha sido el incumplimiento en todas y cada una de las cosas que tanto presumía como candidato y después como titular del Ejecutivo. Y lo anterior viene a la relación debido a que antier volvió a repetir sin rubor que él era ‘un hombre de palabra’ ante los medios», argumenta.

Virgen de Begoña

En «¿Y en dónde quedó el Fonden?», el historiador se pregunta por el destino del Fondo Nacional de Desastres (Fonden) en relación a las víctimas de los últimos huracanes que han afectado al México. «Mientras el país dormía, la fuerza de la naturaleza vino a golpear al estado de Guerrero desde sus costas y hasta tierra adentro, asolando los principales puertos de aquella entidad, empezando por el de Acapulco. Ciertamente, parece que el país dormía y no sólo en sentido figurado, sino en sus principales instituciones públicas, empezando por los gobiernos locales que no hicieron nada por alertar a su población en tanto el Gobierno Federal con su silencio se convertía en el principal corresponsable de los daños y las muertes que ocasionó un huracán que, por sus efectos devastadores, pudo haberse previsto en sus consecuencias funestas, y no lo fue», explica.

Finalmente, el historiador retoma la restauración de la imagen de la Virgen de Begoña, del siglo XVIII, en «La memoria histórica de la Virgen de Begoña en Viesca». «La importancia de la Virgen de Begoña es tal porque demuestra no solo la fundación de dicha villa por el conde de Súchil, a quien la historiografía oficial solía negarle la existencia de la misma, sino que también significó la elaboración y el fatigoso traslado del cuadro, que es nada menos que la advocación del terruño en el que nació, la vieja Bilbao, en la antigua Vizcaya al otro lado del Atlántico, y de la que él era públicamente devoto, pues solía asistir a misa para venerarla frente a su palacio en Guadiana, Durango, en el extinto templo del convento de San Francisco, según consta en antiguas crónicas», relata.