Aldo Olcese
Presidente de la Fundación Independiente y de la Asociación Nacional Sociedad Civil Ahora y vicepresidente y académico de número de la Real Academia Europea de Doctores-Barcelona 1914 (RAED)
Aldo Olcese, presidente de la Fundación Independiente y de la Asociación Nacional Sociedad Civil Ahora y vicepresidente y académico de número de la Real Academia Europea de Doctores-Barcelona 1914 (RAED), ha recibido el reconocimiento del Instituto de Desarrollo Ético de América de Perú por su papel decisivo en la localización de los restos de Fernandito Túpac Amaru, hijo menor del libertador de América Túpac Amaru II y de Micaela Bastidas, que murió en el exilio español en Madrid el 30 de julio de 1798 con el nombre españolizado de Fernando Tupamaro y fue enterrado en el cementerio de la madrileña parroquia de San Sebastián.
Esta entidad tiene el objetivo de repatriar estos restos con motivo de las celebraciones del Bicentenario de la Independencia de Perú el próximo año. Para ello ha suscrito un convenio de carácter histórico y cultural con el Centro de Estudios Históricos Militares de Perú con el compromiso de realizar los tramites para el traslado. «Así se dará cumplida satisfacción a nuestro país del imperio de los incas y a la entera ciudadanía peruana que con gran patriotismo y fervor esperan la repatriación de los restos para recibirlo con honores en el país que lo vio nacer. De esta manera se hará la oportuna reparación moral de quien fuera el último heredero de la dinastía del libertador Túpac Amaru, el que luego de la trágica muerte de sus padres fue trasladado de Cuzco a Lima, para luego ser embarcado en una gran nave con destino a España, donde después de naufragar, padeció una serie de tribulaciones y finalmente falleció en la indigencia y en el exilio y tuvo que ser enterrado de limosna por la caridad de la Iglesia española», señalan los impulsores de esta iniciativa.
El Instituto de Desarrollo Ético de América destaca el papel del vicepresidente de la RAED en su propósito. «En todo momento, pese a la crisis que vive el planeta por el coronavirus, no ha dejado un segundo de dedicarse a una gran cantidad de indagaciones, investigaciones y demás menesteres que acarrean una tarea monumental como es la ubicación de los restos del valiente personaje Fernandito», señala la entidad en una de sus publicaciones. Se da la casualidad que los restos de Miguel de Cervantes también habrían sido enterrados en esta misma iglesia, aunque al parecer luego se trasladaron al cercano convento de las Trinitarias.
«La misión histórica asumida por Aldo Olcese ha sido tan prolija que ha tenido que contactar con el cardenal arzobispo de Madrid, Carlos Osoro, además con el vicario episcopal supervisor de la iglesia de San Sebastián, Alfonso Lozano, y el párroco, Pablo Colino, además de otras autoridades civiles y eclesiásticas, de las cuales ha recibido apoyo total para tan noble objetivo», agradecen los impulsores de la iniciativa.