Fermín Morales, catedrático de Derecho Penal en la Universidad Autónoma de Barcelona, socio de Morales Abogados Penalistas y académico de número de la Real Academia Europea de Doctores-Barcelona 1914 (RAED), lideró el pasado 4 de julio la sesión académica «El manifiesto del Derecho Penal liberal», que se celebró en la Sala de Actos de Fomento del Trabajo, sede de la Real Corporación. El acto contó con la presencia de los reconocidos juristas Gian Domenico Caiazza, presidente de la Unión de Salas Penales Italianas; Nicola Mazzacuva, presidente del Consejo de Salas Penales Italianas y profesor de la Universidad de Bolonia; Gian Luca Malavasi, responsable de la Escuela Territorial de la Sala Penal de Bolonia Franco Bricola y consejero del Colegio de Abogados de Bolonia; Javier Hernández García, magistrado de la Sala Segunda del Tribunal Supremo, y Víctor Moreno Catena, presidente de la Unión Española de Abogados Penalistas y catedrático de Derecho Procesal en la Universidad Carlos III.
Los expertos trataron el proceso de reforma de los procesos penales impulsado en Italia por los propios magistrados y abogados en favor de un modelo profesional y liberal. «En los últimos años, se ha consolidado el populismo punitivo con la consiguiente pérdida de garantías en el sistema penal. En Italia más de 10.000 abogados penalistas se han agrupado en la Unión de Salas Penales y han elaborado un manifiesto del Derecho Penal liberal y del justo proceso. Con la pretensión de difundirlo en la Unión Europea, se presenta ahora en España y es sometido a exposición y debate por parte de Ilustres juristas italianos y españoles», presentó Morales la sesión.
Los ponentes coincidieron con el académico y reconocido penalista que va contra la estabilidad democrática gobernar a través del Derecho Penal, como consideraron que está sucediendo. «Las consecuencias pueden ser, y de hecho están siendo, devastadoras para el equilibrio del sistema institucional. Quien impulsa las leyes es el Gobierno o bien los grupos parlamentarios y quién las aprueba es el Parlamento. Pero es evidente que esas leyes penales deben ser aplicadas por otro poder del Estado, el Poder Judicial», destacó Morales, para quien el primado de la ley penal hace que entre en crisis el principio de legalidad, se suelen producir incertidumbres interpretativas y, muchas veces, los designios gubernamentales no se ven satisfechos en el momento de aplicación de las leyes por parte del Poder Judicial. Esto es lo que ha ocurrido en España, señalaron los juristas, con la reforma del delito de malversación del patrimonio público y en gran medida lo que ha acontecido con la denominada reforma de la ley del «sólo sí es sí».
De la mano de Fermín Morales y otros académicos, la RAED lidera esta reivindicación en España y el futuro del Derecho Penal, de hecho, ha sido el principal argumento que han abordado dos de sus últimos académicos en sus discursos de ingreso. El pasado 14 de marzo, Luis de las Heras, profesor de Derecho Penal de la Universidad Internacional de La Rioja y vicepresidente del Instituto de Derecho Iberoamericano, ingresó de la mano de propio Fermín Morales con el discurso de ingreso «Estado actual del Derecho Penal y la política criminal española», en el que defendió el Derecho Penal como filosofía y abundó en la estrecha relación con la política que ha cobrado en España. Por su parte, Óscar Morales, socio del despacho Morales Abogados Penalistas junto a su también introductor, Fermín Morales, lo hizo el pasado 15 de mayo con el discurso de ingreso «El horizonte de sucesos de la justicia penal», donde también abordó la deriva del Derecho Penal debido a las injerencias políticas.
«Desde hace muchos años asistimos a una creciente subordinación del Derecho Penal a la evolución fáctica de los procesos políticos y a la satisfacción de necesidades coyunturales. Esta tendencia es una manifestación más de la descomposición paulatina que padece el modelo de Estado de Derecho. En la ‘Nueva Edad Media’ que vivimos, periodo histórico caracterizado por dar respuestas primitivas y simples a problemas complejos, es lógico el primado de la ley penal, esto es, que el Derecho Penal aparezca como instrumento del Gobierno», reflexionaba recientemente Fermín Morales en un artículo publicado en «El Periódico» abundando en esta cuestión.