Jaime Rodrigo de Larrucea, académico de número y presidente de la Sección de Ciencias Tecnológicas de la Real Academia Europea de Doctores-Barcelona 1914 (RAED) y presidente de la Sección de Derecho Marítimo del Ilustre Colegio de Abogados de Barcelona, ha realizado el estudio «El derecho y la legislación proactiva: nuevas perspectivas en la ciencia jurídica», donde analiza y compara las dos metodologías existentes en la legislación proactiva: la evaluación de impacto regulatorio y la evaluación formal de seguridad. El trabajo será publicado en el próximo número de Tribuna Plural, la revista científica de la RAED.
El académico empieza por destacar la importancia y el vigor del planteamiento proactivo del derecho, que supone situar al derecho antes del conflicto, frente al clásico esquema del derecho reactivo: el derecho sigue al hecho.
Mediante las metodologías de análisis y gestión de riesgos se pueden detectar los posibles problemas potenciales y generar una cultura preventiva del problema estableciendo y estandarizando los factores de riesgo de determinadas actividades o comportamientos previsibles.
A partir de ahí, Rodrigo de Larrucea analiza el denominado análisis de impacto regulatorio, «un enfoque sistémico para evaluar críticamente los efectos positivos y negativos de las regulaciones propuestas y existentes y otras alternativas no normativas que se emplean en los países de la OCDE y en los países anglosajones abarcando toda una serie de guías y métodos, y la evaluación formal de seguridad, «desarrollada originalmente en respuesta al desastre de la Piper Alpha en 1988, la plataforma petrolífera que explotó en el Mar del Norte causando la muerte de 167 personas».
En su comparativa, el académico destaca las coincidencias de ambas metodologías, por más que en su desarrollo existan notables divergencias y aconseja un acercamiento o fusión. «Los instrumentos actuales pueden ser mejorados, pues dadas las particularidades de cada uno son apreciables ámbitos en los que cabe una revisión en pos de mejorar su eficacia, incorporando elementos de ambas metodologías», concluye el estudio.