Carlos Cortina, delegado para España de las Órdenes Dinásticas de la Casa Real de Saboya y académico de número de la Real Academia Europea de Doctores-Barcelona 1914 (RAED), participó el pasado 7 de octubre en el Capítulo General convocado por Su Alteza Real Víctor Manuel de Saboya, príncipe de Nápoles, en Ginebra, en unas sesiones presididas por el príncipe Manuel Filiberto de Saboya, acompañado por su hija primogénita la princesa Victoria de Saboya y por el gran canciller de las Órdenes Dinásticas, Johannes Niederhauser. La magna cita se celebró en el Hotel President Wilson, sede de la Oficina del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos.
Durante el Capítulo, Cortina fue promocionado como comandante de la Orden de San Mauricio y San Lázaro. Entre la delegación española se nombraron dama de la Orden al Mérito de Saboya a María Teresa Cortina y caballero a Javier Llobet, oficial a Frank Thomas Merten, caballero de la Orden de San Mauricio y San Lázaro a Pablo Álvarez-Cuevas y oficiales de esta misma orden a Fernando Diago de la Presentación y Juan Carlos Magaña. Promocionó a oficial Juan Manuel de Castro. Ingresaron en ausencia y los títulos e insignias les fueron entregados durante la primera cena benéfica de la Delegación para España en el Círculo del Liceo de Barcelona el pasado 9 de noviembre Josep-Enric Peris como oficial de la Orden al Mérito de Saboya y José Vergara como comandante de la Orden de San Mauricio y San Lázaro. El Capítulo concluyó el domingo 8 de octubre en la abadía territorial de San Mauricio de Agauno, donde se ofició una misa de acción de gracias que también contó con la asistencia de la familia real. Esta abadía es una circunscripción eclesiástica que depende directamente de la Santa Sede.
Víctor Manuel IV de Italia es hijo de del último rey de Italia, Humberto II. Está casado con Marina Ricolfi-Doria y tiene un hijo, Manuel Filiberto de Saboya, nacido en 1972, y dos nietas: Victoria y Luisa de Saboya. Tras seis décadas en un exilio obligado por la legislación italiana, en diciembre de 2002 pudo regresar a su país junto a su esposa y su hijo. En ceremonia pública, toda la familia tuvo que jurar la Constitución republicana.
Cortina ha desarrollado su actividad profesional e investigadora en las disciplinas de ceremonial, protocolo y relaciones públicas, desempeñando el cargo de jefe de Relaciones Institucionales y de Protocolo en diversas empresas e instituciones públicas. Es autor de obras de referencia en el ámbito del protocolo como el «Reglament de Protocol, Cerimonial, Honors i Distincions per als Ajuntaments» (2010). Socio fundador de la Asociación Catalana de Protocolo y Relaciones Institucionales, ha sido distinguido con la Medalla de Plata y la Medalla de la Constancia de la Cruz Roja (1991 y 1992), la Cruz Oficial de la Orden del Mérito Civil (2000), el Premio Nacional de Ceremonial y Protocolo Marqués de Mondéjar (2001), el Premio Nacional de Protocolo y Relaciones Institucionales (2017), la Medalla de Oro del Papa León XIII para la Custodia de Tierra Santa (2019) y la Medalla Benemerenza de Oro de la Orden Constantiniana (2021).