Lluís Serra Majem
Rector y catedrático de Medicina Preventiva y Salud Pública en la Universidad de Las Palmas de Gran Canaria, portavoz del Comité Científico para la Emergencia Sanitaria de la Covid-19 en Canarias y académico de número de la Real Academia Europea de Doctores-Barcelona 1914 (RAED)
Dr. Lluís Serra Majem
Lluís Serra Majem, rector y catedrático de Medicina Preventiva y Salud Pública en la Universidad de Las Palmas de Gran Canaria, portavoz del Comité Científico para la Emergencia Sanitaria de la Covid-19 en Canarias y académico de número de la Real Academia Europea de Doctores-Barcelona 1914 (RAED), destacó el papel de la universidad como elemento impulsor de la innovación y el desarrollo social en su primera apertura de curso académico como rector. Su universidad, además, anunció que implantará dos nuevos grados de Ingeniería para el curso 2022-2023: Ingeniería Biomédica e Ingeniería Física y Matemática.
«Creo que ya durante la pandemia esta universidad demostró que tenía capacidad también para ayudar a las acciones de gobierno y ahora durante la crisis volcánica se está viendo claramente, tenemos diversas personas desplazadas, distintos proyectos de cooperación y de investigación, tenemos a una persona que está ejerciendo de portavoz en los medios, catedrático de nuestra universidad, por tanto, hay una presencia importante de la universidad y así es como tiene que ser», señaló el académico.
Para Serra Majem, la universidad ha demostrado ser mucho más que una institución docente, «ha sido el mayor agente de innovación, producción científica y tracción tecnológica», aseguró. En este sentido, destacó que está llamada a convertirse en un «elemento tractor de primera fila junto con los empresarios y otros agentes sociales en la creación de un nuevo tejido productivo basado en el conocimiento». Asimismo destacó su papel en la evolución de la sociedad canaria y española hacia la sostenibilidad. La Universidad de Las Palmas está implicada en el cumplimiento de los Objetivos de Desarrollo Sostenible de la Organización de Naciones Unidas (ONU).
Serra Majem apuntó que el próximo reto de la institución pasaba por motivar a una plantilla que ha mantenido la actividad con muchas carencias y que consideró una «carga de gestión burocrática que les sustrae a todos de lo que deberían ser sus funciones principales». Para resolverlo apostó por la exploración de sinergias con la Universidad de La Laguna, en Tenerife, para mejorar y crecer unidas manteniendo cada universidad su singularidad e independencia.
Por otra parte, el Consejo Social de la Universidad de Las Palmas aprobó la propuesta de implantar los nuevos grados de Ingeniería, que se adscribirán a la Escuela de Ingeniería de Telecomunicaciones y de Ingeniería Informática. Se trata de dos especialidades de las que existen pocos titulados en la Unión Europea, especialmente en España, donde el porcentaje no supera el 5%. Ambos grados contemplan una oferta de 50 plazas en el primer año de titulación.
