Una economía didáctica y solidaria

Gay de Liébana ofrece una conferencia sobre los «Retos económicos para 2019» cuyos beneficios se destinan a la Asociación contra el Rabdomiosarcoma

José Maria Gay de Liébana, profesor de la Facultad de Economía y Empresa de la Universidad de Barcelona y académico de número de la Real Academia Europea de Doctores-Barcelona 1914 (RAED), impartió el pasado 28 de enero en Barcelona la conferencia solidaria «Retos económicos para 2019». Los fondos recaudados se destinarán a los proyectos que la Asociación contra el Rabdomiosarcoma realiza en colaboración con el Hospital Maternoinfantil San Joan de Déu de Barcelona.

Gay de Liébana abordó el problema de la desaceleración económica que se está dando de manera acusada en las economías avanzadas en un momento en el que la volatilidad de los mercados financieros da a entender un recalentamiento en las bolsas mundiales, con Wall Street a la cabeza. Asimismo, el académico situó en el foco de actualidad las tensiones monetarias como consecuencia de las decisiones tomadas por la Reserva Federal y que golpean a las economías emergentes con las subidas de los tipos de interés, como el fin de los estímulos monetarios por parte del Banco Central Europeo, que coinciden con la ralentización de la economía de la zona euro y la pérdida de aceleración de China, además de la amenaza del recorte en la producción de petróleo puesta en marcha por los países de la OPEP.

En su exposición, Gay de Liébana reflexionó también sobre las posibles consecuencias que el Brexit pueda tener no sólo para la economía británica, sino para la de toda la Unión Europea, particularizando en los impactos que acarrearía para España, teniendo en cuenta la importancia del turismo británico, la presencia de más de 250.000 residentes británicos y el papel relevante que Reino Unido juega como socio comercial.

El lado escéptico de la economía viene marcado, según el académico, por las dudas acerca del bienestar mundial, la entrada en zona de riesgo del comercio mundial y del crecimiento económico que debiera evitarse a través de la cooperación internacional y las amenazas derivadas del cambio climático y los problemas de medio ambiente, con pérdida de biodiversidad, los ataques cibernéticos, el empeoramiento de la calidad de vida de los ciudadanos y los peligros de los patógenos biológicos.

Gay de Liébana habló asimismo de las desigualdades de renta, riqueza y oportunidades, de las frustraciones ciudadanas, que se plasman en el crecimiento no inclusivo y en los riesgos que entraña sobre el actual statu quo la aceleración de cambios tecnológicos y que resumió en la destrucción de empleos en segmentos laborales medios y bajos, dando lugar a la polarización laboral en un futuro marcado por la irrupción de la inteligencia artificial y de la robótica.