Miguel Ángel Gallo, académico de número de la Real Academia Europea de Doctores-Barcelona 1914 (RAED) y presidente de su Senado, destaca la importancia de que cualquier empresa familiar cuente con un protocolo específico que la ayude a competir en el mercado así como a superar cualquier crisis de acuerdo a su carácter singular.
«La complejidad, si no se trata con profesionalidad, se vuelve aún más compleja y en este tipo de sociedades la empresa es un contrato entre miembros de una familia -argumenta Gallo-. Dentro de la familia, lo que no está bien unido se corrompe. Por ello, hace falta confianza y unidad. Hay que crear espacios de convivencia para que una empresa triunfe».
Profesor emérito de la escuela de negocios IESE, Gallo realizó estas reflexiones durante su intervención en el Congreso Europeo de Investigaciones Interdisciplinares que la Real Academia celebró entre los pasados 15 y el 22 de julio en el marco de su III Acto Internacional, que se desarrolló en diversas ciudades del Báltico.