Ina Piperaki, presidenta del comité griego de la Asociación Más Europa, asegura que los ajustes exigidos por el Fondo Monetario Internacional, el Banco Central Europeo y la Comisión Europea  (la conocida troika) a su país suponen un «crimen al individuo» que debe ser denunciado y rechazado, como hizo la sociedad griega en referéndum, y establecer las bases para la configuración de lo que ella define como una «Europa humanista».

Académica correspondiente para Grecia de la Real Academia de Doctores (RAD), Piperaki cree que ningún plan de ajuste puede estigmatizar la sociedad griega ni justificar unos recortes que han tenido graves consecuencias para la sociedad griega. A las cifras macroeconómicas, Piperaki contrapone las de una tragedia en el terreno microeconómico que se ha cobrado un millón de empleos, 6.000 suicidios, un 30% de empresas cerradas y un 38% de reducción de salarios en apenas dos años, entre otros datos igual de alarmantes.

En un discurso, «Rien n’est pardonné!», que publica el número 6 de Tribuna Plural, la revista de la RAD, la académica considera que a la luz de estos datos «Europa ha fallado en su voluntad de conseguir unida un progreso económico y social y Grecia un laboratorio para evidenciar la incapacidad de Europa de pasar del Mercado Común a una política común». Ante este fracaso sólo queda, para Piperaki, la construcción de una Europa de las personas.