Francisco López Muñoz participa en la Reunión Internacional en Psiquiatría y Psicoterapia Centrada en el Paciente y en la Jornada de la Sociedad Española de Psiquiatría Clínica
Francisco López Muñoz, profesor de Farmacología y director de la Escuela Internacional de Doctorado de la Universidad Camilo José Cela y académico de número de la Real Academia Europea de Doctores-Barcelona 1914 (RAED), presentó el pasado 9 de febrero en el marco de la II Reunión Internacional en Psiquiatría y Psicoterapia Centrada en el Paciente y II Jornada de la Sociedad Española de Psiquiatría Clínica el trabajo «Depresión resistente al tratamiento: Alternativas terapéuticas». La sesión se celebró en el Hospital Universitario 12 de Octubre de Madrid.
En su exposición, el académico analizó la problemática que supone la denominada depresión resistente al tratamiento (DRT) y cuáles son, a día de hoy, las alternativas terapéuticas disponibles en el arsenal farmacológico. Los trastornos depresivos conforman la patología mental más frecuente, hasta el punto de que su prevalencia está estimada actualmente entre el 9% y el 20%, según diferentes estudios. A nivel mundial, la depresión es la principal causa de discapacidad, suponiendo hasta el 13,4% y el 8,3% del total de años perdidos por discapacidad en mujeres y hombres, respectivamente.
Una parte de esta discapacidad se debe a que sólo un pequeño porcentaje de pacientes recibe un tratamiento correcto, mientras que otros reciben dosis inadecuadas o tienen una pobre adherencia terapéutica.
López Muñoz resaltó que, habitualmente, la primera línea de tratamiento de los trastornos depresivos suelen ser los antidepresivos de la familia de los inhibidores selectivos de la recaptación de serotonina (ISRS) o los inhibidores de la recaptación de noradrenalina y serotonina (IRSN). Pero el alivio de los síntomas que ocasionan estos agentes no ocurre antes de la segunda o tercera semana de tratamiento y tan sólo el 28% de pacientes logran la remisión dentro de las 10 a 14 semanas de tratamiento. Además, entre el 30% y el 45% de los pacientes no responden a los tratamientos o presentan respuestas parciales.
El académico desglosó las alternativas farmacológicas propuestas en la actualidad para abordar este problema, como la optimización de la dosis del antidepresivo, la sustitución o cambio del antidepresivo por otro, generalmente de grupo farmacológico diferente, la asociación del antidepresivo de base con otro antidepresivo con mecanismo de acción complementario o las técnicas de potenciación, consistentes en la adición de un medicamento no perteneciente al grupo de los antidepresivos, como el litio, las hormonas tiroideas o los antipsicóticos atípicos. Concluyó destacando que, aunque la DRT es un fenómeno clínico habitual, la evidencia científica sobre su abordaje terapéutico sigue siendo limitada.