José Ángel Brandín, director de Auditoría Interna en España del holding aeronáutico IAG, ingresa en la Real Academia
José Ángel Brandín, Doctor en Gobierno y Cultura de las Organizaciones, ingresó como académico correspondiente de la Real Academia Europea de Doctores-Barcelona 1914 (RAED) durante una ceremonia que tuvo lugar el pasado 6 de junio en el Salón de Actos de Fomento del Trabajo Nacional, sede de la Academia. El recipiendario leyó el discurso de ingreso «La confianza razonada: un medio para la gestión de la incertidumbre en los procesos de las organizaciones». Le respondió en nombre de la Real Corporación el académico de número José Daniel Barquero. Al acto asistieron más de 100 personas y una veintena de académicos.
Especialista en evaluación de riesgos, control interno y auditoría interna y actual director de Auditoría Interna en España del holding aeronáutico International Airlines Group (IAG), el nuevo académico analiza en su trabajo las facetas y distintos grados de la confianza dentro de la empresa, deteniéndose en lo que denomina la confianza razonada, y su valor estratégico para cualquier sociedad mercantil. «En el ámbito de las organizaciones no consiguen aprehender totalmente la esencia de la confianza, las perspectivas que la identifican principalmente como un estímulo para la creatividad, la innovación, la satisfacción, la cohesión, la vinculación y la motivación o la productividad; como medio facilitador en la gestión del conflicto, la negociación, la asunción de la cadena de mando, la coordinación, la cooperación y el intercambio de información y conocimiento en y entre las organizaciones; o bien como complemento al poder de las jerarquías y a los incentivos económicos propios del mercado para dirigir las transacciones económicas», inicia Brandín su reflexión.
Tras definir el concepto de confianza razonada mediante una serie de puntos y condicionantes, analizar la relación entre la confianza y la desconfianza dentro del marco de la organización empresarial, definir y alertar sobre la confianza incondicional y reseñar el origen y evaluar la confiabilidad, el nuevo académico aborda el desarrollo de esa confianza razonada en el seno de la organización partiendo de la relación entre cooperación y confianza y pone en consideración su valor ante la gestión de la incertidumbre.
«La confianza no es lo primero: lo es la confiabilidad; aunque la acción de confiar sí que sea lo realmente determinante, incluso lo más importante si se quiere ver así. Y ello desde la convicción de que la mayoría de las personas las más de las veces deseamos realmente contribuir dentro de los límites de nuestra capacidad a la misión de la organización en la que desempeñamos nuestro cometido y, además, queremos y somos capaces de desplegar niveles de iniciativa, creatividad y autocontrol adecuados a las tareas que desarrollamos y a los objetivos que nos son encomendados. Planteamiento éste compatible con la recomendación incondicional de incrementar de forma proactiva nuestra confiabilidad, ya que nada de lo dicho ni observado lo desaconseja, ni dentro ni fuera del ámbito organizacional. Confiabilidad que, en tanto que fundamento de la confianza razonada, resulta ser así punto de partida para el establecimiento de un equilibrio eficiente y verdaderamente humano entre la confianza y el control en los procesos de la organización. Conclusión esperanzada y a la vez motivo para ulteriores reflexiones no menos prometedoras», concluye Brandín.