Dr. Jaume Antich Femenías
El periodista Lluís Simon firma un emotivo artículo en el diario «El Punt-Avui», aparecido en la edición del pasado 16 de septiembre, en el que recuerda la trayectoria vital, profesional y científica de Jaume Antich Femenías, reconocido experto en genética y dismorfología y académico emérito de Real Academia Europea de Doctores (RAED) y miembro de su Senado, fallecido el pasado 10 de septiembre a los 90 años. La Junta de Gobierno de la Real Corporación, en nombre de toda la comunidad científica, reitera su reconocimiento al finado y a su firme compromiso con la institución, se suma a familiares y amigos en el duelo y agradece este sentido y merecido homenaje.
«Uno de los grandes referentes de la pediatría y la genética clínica en Cataluña, Jaume Antich Femenias (Barcelona, 1934), murió miércoles pasado a los 90 años dejando un legado de gran relevancia a la medicina del país. Su trayectoria, como señala la familia, fue mucho más allá de su pericia. ‘Fue un profesional de una gran humanidad, inquieto para aprender siempre, y un referente que supo escuchar, acompañar y curar, también con las palabras’. Era considerado toda una eminencia en sus ámbitos. Fue miembro, entre otras instituciones de renombre, de la Academia de Ciencias Médicas de Barcelona y, desde 1980, lo era de la Real Academia Europea de Doctores», comienza el obituario.
Simon explica cómo el académico lideró diversos proyectos clave para el desarrollo de la investigación en España, como el Departamento de Genética Humana y el Instituto de Bioquímica Clínica de la Diputación de Barcelona o la Unidad de Genética del Hospital Sant Joan de Déu. En los años 90 del siglo pasado asumió la Presidencia de la Sección de Genética y Dismorfología de la Asociación Española de Pediatría. Y desde el 2001 había sido consultor y moderador del portal especializado lagenetica.info, donde respondía a las consultas de su blog. Fue reconocido oficialmente como investigador de alto nivel, escribió más de 60 publicaciones en sus ámbitos de investigación y formó parte del Comité Organizador del encuentro que la Sociedad Europea de Genética celebró en Barcelona.
«Su currículum era el de un profesional de primer orden, pero la familia destaca también otros méritos, como su don de escuchar a todos los pacientes. Su vida no giró solo en torno a la medicina. De joven fue un nadador de élite y, desde siempre, un enamorado del mar, la lectura y la música clásica, que no paraba de sonar a todas horas en el domicilio. Acumuló una biblioteca con miles de volúmenes de todas las materias y en múltiples idiomas y hasta el final estivo atento a la actualidad cada día. Su erudición iba mucho más allá de la medicina. Una vez jubilado, por amor a la filosofía, la literatura y el arte se matriculó en Humanidades para la Universitat Oberta de Catalunya. Se graduó en 2011 en una ceremonia en la que lo acompañaron hijos y nietos», concluye el texto.
