Jordi Cervós
Catedrático emérito de Neuropatología y exvicedecano de la Universidad Libre de Berlín, expresidente de la Sociedad Alemana de Neuropatología y Neuroanatomía, exrector de la Universidad Internacional de Cataluña y académico emérito de la Real Academia Europea de Doctores-Barcelona 1914 (RAED)
La Junta de Gobierno de la Real Academia Europea de Doctores-Barcelona 1914 (RAED), en nombre de toda la comunidad académica, se suma al duelo por la pérdida de su académico emérito Jordi Cervós, catedrático emérito de Neuropatología y exvicedecano de la Universidad Libre de Berlín, expresidente de la Sociedad Alemana de Neuropatología y Neuroanatomía, exrector de la Universidad Internacional de Cataluña y académico emérito de la Real Academia Europea de Doctores-Barcelona 1914 (RAED), donde ingresó el año 2002, que falleció el pasado domingo, 14 de noviembre, en su domicilio de Matadepera (Barcelona) a los 91 años.
Nacido en Barcelona en 1930, el desaparecido académico estudio Medicina en la Universidad de Barcelona y en la Universidad de Zaragoza y en 1952 se trasladó a Alemania, donde se especializó en Neuropatología y desarrolló buena parte de su carrera profesional y académica. Obtuvo el doctorado en Medicina con premio extraordinario y empezó una fecunda carrera investigadora que le llevó a descubrir la existencia de nervios en las arteriolas, por lo que se le considera el padre de la microcirculación cerebral.
En sus 40 años en Alemania, Cervós fue catedrático y vicerrector de la Universidad Libre de Berlín y presidente de la Sociedad Alemana de Neuropatología y Neuroanatomía. Por su trayectoria en la investigación fue reconocido con varios doctorados honoris causa por universidades de España, Grecia, Alemania, Japón y Rusia y galardonado con la Gran Cruz del Mérito Civil de la República Federal Alemana, la Gran Cruz de la Orden Civil Alfonso X el Sabio, y la Creu de Sant Jordi.
En 1997 se convirtió en uno de los promotores y el primer rector de la Universidad Internacional de Cataluña, un cargo que ocupó hasta 2001, cuando pasó a director de Relaciones Internacionales hasta dejar el centro en 2007. Organizó e impulsó la investigación científica, imprimió a la institución una fuerte internacionalidad y creó la Facultad de Medicina y Ciencias de la Salud. Uno de los laboratorios de esta Facultad lleva hoy su nombre.