Aldo Olcese
Presidente de la Fundación Independiente y de la Asociación Nacional Sociedad Civil Ahora y vicepresidente y académico de número de la Real Academia Europea de Doctores-Barcelona 1914 (RAED)
Aldo Olcese, presidente de la Fundación Independiente y de la Asociación Nacional Sociedad Civil Ahora y vicepresidente y académico de número de la Real Academia Europea de Doctores-Barcelona 1914 (RAED), comparte con la comunidad académica la campaña en defensa del reconocimiento de la lengua española en la educación que la asociación que preside ha impulsado junto a destacadas entidades sociales y culturales como la Asociación Libres e Iguales, Consenso y Regeneración, la Fundación Joan Boscà, la Fundación Transforma España, La España Cívica, La España que Reúne o Societat Civil Catalana.
La campaña, lanzada públicamente el pasado 6 de diciembre, día de la Constitución Española, tiene como principal cara visible al escritor y premio Nobel de Literatura Mario Vargas Llosa y trata de dar respuesta a la nueva ley de Educación, la denominada ley Celáa, por haber retirado al español la condición de lengua vehicular en la enseñanza en toda España.
Manifiesto
La sociedad civil más representativa, unida con Vargas Llosa en defensa de la Constitución y el idioma español
Este 6 de diciembre celebramos la Constitución de 1978 y reafirmamos su vigencia como garantía de la paz civil española y de la libertad, igualdad y bienestar de los ciudadanos.
Rechazamos todas las maniobras que promueven la liquidación del orden constitucional. Con especial énfasis, denunciamos la decisión de eliminar de la ley de Educación la referencia al español como lengua vehicular de la enseñanza. No nos preocupa la salud de una lengua que hablan más de 500 millones de personas. Nos preocupa, y gravemente, este nuevo ataque al derecho de miles de castellanohablantes a aprender en su lengua materna. Y el ataque viene ahora del propio Gobierno de la nación.
La ley Celaá desprecia el valor moral y económico de la koiné, erosiona uno de los más poderosos vínculos que nos unen como españoles y refuerza la insólita condición de España como el país en que algunos de sus hijos no pueden ser educados en la lengua oficial del Estado.
Los derechos democráticos de los ciudadanos no deben estar sujetos a negociación política; no pueden ser usados como moneda que pague una determinada mayoría parlamentaria. Un gobierno no puede constituirse ni mantenerse a costa de la democracia. El español tiene que volver a ser reconocido como lengua vehicular en la ley y los derechos lingüísticos de los españoles deben recibir amparo y protección en todo el territorio.
Agradecemos al premio Nobel de Literatura Mario Vargas Llosa que haya vuelto a prestar su palabra y su voz a una iniciativa en defensa de la Constitución y de los valores que distinguen y unen a las grandes democracias del mundo. Vargas Llosa es ciudadano español por elección, maestro de nuestra lengua común y referente indiscutible de la lucha por la libertad y los derechos humanos.