La Real Academia de Doctores de España y la Real Academia Europea de Doctores reflexionan sobre la gestión y difusión de los bienes de interés cultural y natural

La Real Academia de Doctores de España (RADE) y la Real Academia Europea de Doctores-Barcelona 1914 (RAED) celebraron el pasado miércoles, 20 de marzo, en la Sala de Actos de la Biblioteca Marqués de Valdecilla de Madrid la mesa redonda «Patrimonio mundial e inmaterial de España». En la sesión participaron Ignacio Buqueras, académico de número de la Sección de Humanidades de la RADE, presidente de la Asociación para la Difusión y Promoción del Patrimonio Mundial de España y académico de número electo de la RAED; Emilio de Diego Martínez, académico numerario y presidente de la Sección de Humanidades de la RADE, y Santiago Castellà, académico de número y miembro de la Junta de Gobierno de la RAED y secretario general de su fundación. Antonio Bascones, académico numerario presidente de la Real Academia de Doctores de España, presentó el acto y ejerció como moderador del debate, en tanto que Alfredo Rocafort, académico de número y presidente de la Real Academia Europea de Doctores, dirigió unas palabras de agradecimiento a la RADE por su acogida y su firme apuesta de un trabajo en común entre ambas instituciones académicas.

Bascones destacó el valor del patrimonio español, tanto material como inmaterial, e instó a la sociedad civil y, lógicamente, a las administraciones a protegerlo y difundirlo. «Una de las cosas en la que más orgullosos tendríamos que estar es del patrimonio de España. Tenemos riquezas por todas partes y en todos los lugares desde el norte al sur y desde el este al oeste. Somos un país que ha sabido trasladar una lengua, unos valores y una cultura a otros países y continentes a lo largo de la historia abriendo rutas comerciales y facilitando lazos de unión con muchas culturas y formas de vida diferentes. Nuestro futuro sólo es factible desde la óptica de la confianza en nosotros mismos y del conocimiento de nuestra historia en común», señaló en su introducción de la sesión.

Buqueras, por su parte, reseñó de forma sucinta los elementos patrimoniales y naturales reconocidos y protegidos por la Unesco en España y su distribución por Comunidades Autónomas. Asimismo explicó la labor de la Asociación para la Difusión y Promoción del Patrimonio Mundial de España. «A pesar de contar con uno de los patrimonios más importantes a nivel internacional, lamentablemente no es del todo ni conocido ni apreciado ni valorado por la sociedad española. Es por ello que en el año 2018 decidimos crear la asociación», explicó. La edición del libro «El patrimonio mundial e inmaterial de España», que dio nombre a la mesa redonda, es la culminación de más de cinco años de trabajo.

Castellà abordó la cuestión de la construcción de un imaginario común de la españolidad. Inició su reflexión en torno a las ciudades, en especial las ciudades patrimonio, como aportación de Occidente al mundo: la ciudad como espacio cosmopolita, complejo, racional, dinámico, suma de esfuerzos para generar excedentes que repartir y con ello generadora de un espacio público convivencial y de la administración de servicios comunes. El ponente explicó que las ciudades patrimonio nos permiten preguntarnos y buscar respuestas sobre lo que somos, pero sobre todo sobre lo que queremos ser: se trata de construir un imaginario colectivo de la españolidad, incluso de lo hispano. Y expuso cómo la idea de la tercera España, de la España siempre imposible, expulsada o sometida, había sido el espacio desde donde reflexionar sobre el sentido profundo de qué es ser español y cuál ha sido el papel de la hispanidad en la construcción del imaginario de Occidente. La intervención de De Diego, por otra parte, se centró en el ejemplo de Segovia y la gestión ejemplar de su patrimonio.