Antoni Matabosch, académico de número de la Real Academia Europea de Doctores-Barcelona 1914 (RAED) ha donado a la Biblioteca de la Academia un ejemplar de su obra «Ecologia integral i supervivència», publicada en octubre de 2019 y donde aborda la crisis medioambiental que sufre la Tierra y la aportación que han hecho las iglesias cristianas, especialmente el Consejo Mundial de las Iglesias, la Iglesia Católica y muy en particular el Papa Francisco en su conocida encíclica «Laudatio sí», para concienciar y poner remedio a este grave problema. El libro está prologado por el arzobispo de Barcelona, el cardenal Joan Josep Omella.
«A lo largo de los últimos decenios se ha ido tomando cada vez mayor conciencia de los graves problemas que crea una desmedida carrera hacia el progreso sin tener en cuenta las limitaciones de nuestro planeta y la justa distribución de sus riquezas. Hemos abusado y ahora la naturaleza se muestra cada vez más exhausta, pese a lo que puedan decir algunos, sordos y ciegos, que se aprovechan de la devastación. Se han escritos muchos libros que analizan el peligro que estamos corriendo y las graves consecuencias que provoca no tener cuidado de nuestra casa común, la Tierra», señala el propio autor en el libro.
«Ecologia integral i supervivència» aborda este gran reto de la humanidad desde una perspectiva que va más allá del simple análisis de los hechos, profundizando en las causas históricas que nos han llevado a la situación actual: esa ideología del progreso, con el bienestar del ser humano como centro y dueño de todo y la tecnología como religión. Como contrapunto sitúa los postulados cristianos sobre creación y ecología, que pueden ser de gran ayuda en el camino hacia una conversión y espiritualidad ecológicas, necesarias para lograr una ecología integral. «No se puede cambiar nada sin una nueva mentalidad y unos nuevos criterios para vivir en este mundo. Y no tenemos ningún otro de repuesto», señala el autor.
«Ante la magnitud del problema ecológico es necesario que reaccionemos y no seamos indiferentes al sufrimiento de la Tierra. Es una cuestión de futuro y de retorno al amor de Dios. De futuro, porque si no damos un giro de timón a la situación actual el planeta corre un gran riesgo. De retorno al amor de Dios, porque queriendo esta Tierra le manifestamos nuestro amor», considera monseñor Omella en la introducción de la obra, en la que pide una «conversión ecológica».
Matabosch fue ordenado sacerdote en Roma en 1959, se doctoró en Teología en la Pontificia Universidad Gregoriana de Roma y es licenciado en Ciencias de la Comunicación y en Historia Contemporánea en la Universidad Autónoma de Barcelona. Es catedrático emérito de la Facultad de Teología de Cataluña, de la que fue decano entre 1978 y 1988. Fue delegado de Pastoral Universitaria, de Apostolado Seglar y de Economía de la Archidiócesis de Barcelona, director del Instituto Superior de Ciencias Religiosas de Barcelona y presidente de la Fundación Joan Maragall, entre otros destacados cargos. Ha publicado diez libros y cientos de artículos en temáticas culturales, ecumenismo y relación entre fe y cultura.