Félix de la Fuente, reconocido jurista y colaborador habitual de la Real Academia Europea de Doctores-Barcelona 1914 (RAED), reflexiona sobre las consecuencias que tendrá para millones de ciudadanos, británicos y no británicos, la inminente salida de Reino Unido de la Unión Europea en el artículo «El Brexit, la triple traición». Es autor del «Glosario Jurídico de la Unión Europea» y el «Dictionnaire juridique de l’Union Européenne», dos obras de referencia del Derecho comunitario. De la Fuente considera que una decisión política no puede quitar sin más la ciudadanía europea en contra de su voluntad a las personas que han votado a favor de la permanencia en la Unión Europea. «Aunque esto no esté claro en la letra del Tratado de la Unión Europea, sí responde a su espíritu y a su lógica», argumenta el autor.

«Todo el mundo admite que no se puede mantener eternamente unidas a dos personas o dos Estados en contra de su voluntad, tampoco dentro de la Unión Europea.  Pero aquí no estamos ante un matrimonio ni ante un divorcio. El Brexit es algo mucho más serio que un divorcio -argumenta De la Fuente-. No se trata solamente de dos  personas o dos Estados. Aquí tenemos a muchas terceras personas que se ven afectadas negativamente por las decisiones tomadas por otros.  Tampoco se trata de de un acuerdo internacional entre dos o varios Estados, que se puede abandonar en cualquier momento».

Félix de la Fuente Pascual

Félix de la Fuente Pascual

El jurista argumenta que durante más de medio siglo, desde la redacción de los Tratados de la Comunidad Europea, y posteriormente en el primer Tratado de la Unión Europea, no se planteó la posibilidad de un Estado miembro de abandonar la Unión. «No entra en la lógica del proceso de integración europea la posibilidad de abandonar este proyecto común. Cuando un Estado miembro se adhiere a la Unión Europea, lo hace resuelto a salvar una nueva etapa  en el proceso de integración europea emprendido con la constitución de las Comunidades Europeas y lo hace  convencido de la necesidad  de sentar unas bases firmes  para la construcción de la futura Europa. Esto es lo que nos dice el preámbulo del Tratado de la Unión Europea. La adhesión a la Unión no es un matrimonio o un compromiso entre el Estado que se adhiere y los demás Estados miembro», considera el autor.

Para De la Fuente, abandonar la Unión Europea «es derrumbar una parte del edificio europeo que se había levantado, es decir a sus propios ciudadanos y a los ciudadanos de los demás países miembros que ya no me interesa el proyecto, que no quiero seguir con vosotros en busca de una paz y un bienestar duraderos para Europa, es decir públicamente que de mí no os podéis fiar, pues no me tomo los compromisos en serio. El Brexit es, por tanto, una traición de los gobernantes británicos a su propia conciencia y a su propia responsabilidad, es una traición a los ciudadanos británicos que quieren seguir unidos a la Unión y es una traición a los demás ciudadanos».