«Dos prácticas han gozado de una personalidad sagrada en culturas sin contacto: la trepanación y la circuncisión»
Joaquim Gironella, académico de número y miembro de la Junta de Gobierno de la Real Academia Europea de Doctores-Barcelona 1914 (RAED), ha participado en la XVI edición del Seminario Internacional «Penser l’Europe», organizado por la Academia Rumana, la Fundación Nacional para las Ciencias y las Artes de Rumanía y la RAED, entre otras instituciones de carácter internacional. Las sesiones se celebraron entre los pasados 29 y 30 de septiembre en Bucarest bajo el título «Religions et l’indentité européene». Gironella presentó el trabajo «Cirugía en los ritos religiosos y sociales», donde expuso el papel determinante de las prácticas quirúrgicas y médicas en la constitución de la identidad social y personal.
«Desde casi nuestros orígenes la cirugía ha tenido un papel destacado en numerosas comunidades para la adquisición de una identidad personal o del clan. Dos cirugías ejercidas por los cirujanos-sacerdotes o chamanes de la tribu han gozado de una personalidad sagrada: la trepanación y la circuncisión», explicó el académico, que destacó la presencia de estas prácticas en civilizaciones alejadas y sin contacto. Por las últimas prácticas conocidas se supone que la trepanación ha tenido como objeto en todas las culturas que la han practicado la formación simbólica del espíritu y su limpieza, en tanto que la circuncisión ha estado relacionada con la fecundidad, los credos religiosos, las identidades ideológicas y un sistema de orden social. «Los hallazgos arqueológicos sitúan los yacimientos donde se hallaron cráneos trepanados en Europa central y meridional, en la zona andina de Perú y Ecuador y algunos en el extremo oriente», resaltó Gironella.
En cuanto a la identidad como concepto social, Gironella destacó como se trata de un concepto emocional que sigue uniendo a los individuos. «La identidad cultural es una expresión que conlleva importantes connotaciones emocionales. Es importante señalar que éstas no vienen reguladas por la corteza cerebral prefrontal, sede del raciocinio, sino por el sistema límbico (tálamo, hipotálamo, amígdala cerebral, hipocampo…), donde las neuronas interaccionan muy rápidamente sin necesidad de estructuras cerebrales superiores y son las responsables de regular además de las emociones, el miedo, el sexo, el hambre y todos los instintos».