José María Baldasano alerta de la urgencia de pasar a la acción para abordar con éxito la crisis climática
José María Baldasano, catedrático de Ingeniería Ambiental de la Universidad Politécnica de Cataluña, consultor del Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente y académico de número de la Real Academia Europea de Doctores-Barcelona 1914 (RAED), publicó el pasado 3 de diciembre en el diario «La Razón» el artículo «¿Estamos a tiempo? ¿Debemos mantener la esperanza?», en el que reflexiona sobre las medidas que urgen para atenuar en lo posible los efectos ya visibles de la crisis climática. «La cuestión ya no es si debemos, es que ya no podemos dejar de emprender sin dilación alguna las transformaciones radicales que necesitamos hoy o nos deberemos enfrentar a las consecuencias de un planeta radicalmente modificado por el actual cambio climático inducido de forma totalmente acelerada por la especie humana», considera.
Para el académico, aunque las previsiones tienen incertidumbre, existe un total grado de coincidencia en las tendencias y sus direcciones. «Éstas indican que tenemos posibilidades reales de tener menor cantidad y distinta distribución de lluvias a lo largo del año, olas de calor más intensas y frecuentes, sequías, huracanes más fuertes, desaparición de glaciares y capas de hielo, un inevitable aumento del nivel del mar, y toda la destrucción de ecosistemas con la consiguiente pérdida de biodiversidad que esto conlleva», señala. Baldasano denuncia la inacción de la comunidad internacional y los gobiernos pese al alud de documentos, informes y acuerdos que no dejan de ser papel mojado ante el incremento de emisiones de gases de efecto invernadero.
«La gran paradoja consiste en que por un lado se nos llena la boca hablando parabienes sobre el desarrollo sostenible, pero en realidad seguimos actuando sobre la base de un modelo económico basado en un desarrollo sostenido; es decir, de seguir creciendo y creciendo. Para cambiar esta situación debemos modificar el actual modelo de producción, de consumo y energético, y ello afecta de forma profunda a la base del sistema socioeconómico. El mundo científico ya ha diagnosticado la magnitud del problema, las soluciones derivan de las decisiones y actuaciones políticas», señala.
Baldasano considera que apenas tenemos tres décadas para cambiar enteramente los modelos de producción, consumo y transporte. «No podemos estar esperando a 2030 y a 2050, ni mucho menos a 2100 para actuar cuando el incremento de temperatura sería entre 3ºC y 4 ºC. Si no actuamos hoy no vamos a lograr el objetivo de atemperar la dinámica del actual cambio climático que estamos forzando por nuestro modelo de sociedad», considera. «La humanidad se enfrenta por primera vez frente a un problema de crecimiento de complejidad global, que afecta directamente a todo el planeta y muy especialmente a la supervivencia de la actual civilización humana más que a la propia supervivencia del planeta», concluye.
Baldasano ha sido director del Departamento de Proyectos de Ingeniería de la Universidad Politécnica de Cataluña, director del Instituto de Petroquímica Aplicada y del Instituto de Tecnología y Modelización Ambiental. Fundó y dirigió el programa de doctorado en Ingeniería Ambiental, primero en España. Fundó y codirigió el Máster en Ingeniería Ambiental y el Departamento de Ciencias de la Tierra del Barcelona Supercomputing Center-Centro Nacional de Supercomputación. Fue responsable del desarrollo legislativo sobre residuos industriales en la Generalitat de Cataluña y miembro del Consejo Asesor del Ministerio de Medio Ambiente, hoy Ministerio para la Transición Ecológica, entre otros cargos vinculados a la Administración. Es también asesor del Banco Mundial.