El historiador mexicano Enrique Sada continúa su colaboración con la Real Academia Europea de Doctores-Barcelona 1914 (RAED) con su trabajo «La Res Publicae: de la administración a la gestión pública», que publicará la revista de la RAED, Tribuna Plural, en su próximo número. En este nuevo estudio, Sada trata de definir el concepto de gestión pública tanto desde un punto de vista jurídico como histórico, siempre bajo el prisma de su vinculación al Estado como principal fuente de sustento. «La Administración Pública consiste nada menos que en el giro del rotor, el resorte y los mecanismos que se mueven al interior de esta gran maquinaria; es decir, en la actividad del Estado», inicia el estudioso su reflexión.
Sada sitúa el origen del concepto en la antigua China, con la denominada Constitución Zhouó Chow, donde ya se detallan todos aquellos cargos, labores y responsabilidades correspondientes para aquellos en quienes se delegaba las funciones de servir al emperador y su cuerpo gobernante y donde ya se manifiesta tanto el conocimiento como el uso frecuente de la Administración como base de todo desarrollo político, religioso, social, económico y hasta jerárquico.
Continúa su recorrido en la Grecia clásica, donde Sócrates llega a desarrollar sus propias Teorías del Estado en aras de preservar el equilibrio necesario para asegurar tanto la perpetuidad en el poder como la del pueblo mismo. Asimismo, Platón, en «La República», incide en una serie de principios encaminados al desarrollo de un régimen representativo de ciertas clases, precursor natural de nuestra actual e incipiente democracia, pero siempre a través de la administración de lo que él mismo reconoce como los «negocios públicos».
Enrique Sada Sandoval
«Sin embargo, no será sino hasta el auge de la civilización romana y del Imperio cuando se logra patentar en sí la puesta en práctica de toda la teoría administrativa conocida, hecho que llegará a manifestarse tras la era de los césares y la constante expansión gracias a las actividades de Gobierno», considera el historiador.
Tras analizar la Administración de los reinos medievales, Sada se detiene en la figura de Francis Bacon, que brindará también su aportación a la Ciencia de la Administración a través de lo que será el Principio de la Prevalencia de lo Accesorio. Así como en «El contrato social» de Jean-Jacques Rousseau. Aunque será durante la Revolución Industrial cuando se sentarán las bases para el desarrollo de la denominada Teoría Clásica de la Administración. La que llevarán a cabo los pioneros de la Administración: Adam Smith, David Ricardo, Andrew Ure y Alfred Marshal, hasta la llegada de Karl Marx. Todo ello desembacará en el actual concepto de gobernanza, vinculada a la democracia en su concepción contemporánea.
