Montserrat Casanovas, catedrática de Economía Financiera y Contabilidad de la Universidad de Barcelona, presidenta de la Asociación Catalana de Contabilidad y Dirección (ACCID) y académica de número y miembro de la Junta de Gobierno de la Real Academia Europea de Doctores-Barcelona 1914, presentó el pasado 29 de septiembre el último informe del Observatorio Financiero del Consejo General de Economistas, que ella misma coordina, referente al primer semestre del año. El estudio mantiene en el 3,9% sus previsiones para el crecimiento del Producto Interior Bruto (PIB) español este año y rebaja al 1,5% sus estimaciones de cara al próximo año, muy lejos de las más optimistas del Gobierno. Aun previendo que el crecimiento del tercer trimestre sea positivo, como consecuencia del buen comportamiento de la temporada turística, el informe apunta a una desaceleración de la actividad económica tanto en España como en la Eurozona.
El Observatorio revisa al alza la estimación de la deuda pública sobre el PIB a final de 2022, derivado por el incremento registrado en los últimos meses (0,8% en julio en tasa mensual y más del 4% en lo que va de año) y la previsión de una desaceleración del PIB en el último trimestre. A esto se une el aumento de la carga financiera de la deuda pública por del incremento de los tipos de interés. El BCE, de hecho, aumentó en septiembre los tipos de interés en 0,75 puntos hasta dejarlo en 1,25% y se esperan nuevas subidas de tipos a corto y medio plazo para intentar moderar la tasa de inflación de la Eurozona.
«La política agresiva de los bancos centrales, con importantes subidas en los tipos de interés para hacer frente a una inflación desbocada, ha provocado fuertes caídas en la inmensa mayoría de las bolsas. En España, el problema de la inflación se ve agravado por la fuerte depreciación del euro, que encarece las importaciones de materias primas pagadas en dólares», señaló la académica al respecto en una presentación en la que también participaron el presidente del Consejo General de Economistas, Valentín Pich; el director del Servicio de Estudios del Consejo, Salvador Marín, y el también coordinador del Observatorio Salustiano Velo.
Ante una tasa de variación interanual del IPC adelantado del mes de septiembre situada en el 9% (1,5 puntos menos que en agosto), Pich advirtió del riesgo a una recesión y pidió prudencia tanto al Gobierno como a los reguladores. «Pese a la bajada de un 1,5 puntos del IPC adelantado de septiembre, según datos publicados por el Instituto Nacional de Estadística, que pueden dar síntomas de moderación de la inflación, tan esperada, otros indicadores tanto nacionales como europeos siguen su tendencia decreciente, por lo que se prevé una desaceleración de nuestra economía, así como de otras principales economías mundiales, por lo que las administraciones públicas deberán actuar con mucha prudencia para controlar el déficit y deuda pública, sobre todo en entornos de tipos de interés crecientes como nos encontramos».
«La política económica de los bancos centrales con subidas abruptas de tipos de interés es más efectiva cuando la inflación es de demanda y menos cuando es de oferta, como ocurre en Europa y España. Estas medidas tienen un menor efecto sobre la inflación que en Estados Unidos, dado el peso que tienen en la misma la energía y los alimentos no elaborados, aquí en torno al 60% cuando allí no llega al 30%. Precisamente en Estados Unidos, la parte más importante de la inflación viene por la presión de los salarios, en un mercado laboral con pleno empleo -explicó Velo-. Los altos tipos de interés, la inflación desbocada y la carga añadida que supone la imposición indirecta sobre productos cuyos precios han aumentado exageradamente están haciendo que el consumo se esté resintiendo, máxime cuando hasta ahora se observa una contención salarial, con una pérdida de poder adquisitivo cercana a los 7 puntos. A estas alturas es indispensable un pacto de rentas».
Casasnovas es también presidenta de la Comisión de Economistas Docentes e Investigadores y del Foro de Economistas en Mercados Financieros del Colegio de Economistas de Cataluña y vicepresidenta de la Comisión Financiera del Registro de Economistas Asesores Financieros del mismo Consejo General de Economistas de España.