Xabier Añoveros, vicepresidente de la Real Academia Europea de Doctores-Barcelona 1914 (RAED), ha intervenido en el III Acto Internacional que celebra la institución en el Congreso Europeo de Investigaciones Interdisciplinarias que lleva por título «La evolución de la ciencia en el siglo XXI» y que se celebra hasta el 22 de julio en diferentes ciudades del Báltico, con la ponencia «Agustín de Bethencour, un ingeniero genial de los siglos XVII y XIX entre España y Rusia». El trabajo muestra la trascendencia del citado ingeniero como diseñador de la ciudad de San Petersburgo, por encargo del zar, antes de la llegada de la delegación de la Real Academia a la ciudad rusa.
«Agustín de Betancourt tiene una personalidad científica tan sobresaliente que cualquier pormenor de su vida cobra por sí solo interés -ha asegurado Añoveros-. Betancourt desarrolla su vida y su trabajo en cuatro países dispares: España, Rusia, Francia e Inglaterra. Vivió su juventud siendo ya un reconocido científico y trabajando de espía para el conde de Floridablanca para averiguar el funcionamiento de la tecnología francesa. Años más tarde trabajó para el gobierno francés construyendo una máquina propia de vapor que imitaba a la inglesa en pleno florecimiento de la Revolución Industrial. Debido a su mala relación con Manuel Godoy en España, Betancourt decidió probar suerte en Rusia bajo el mando del zar Alejandro I y en 1812 construyó uno de los puentes más importantes de Rusia, el Kamennoostrovski. Finalmente, fue el protagonista de la urbanización de ciudades tan importantes como San Petersburgo».