El académico Luis Pons revela su pasión por la fotografía con la presentación de su último trabajo a pie de calle

Luis Pons, ingeniero químico e industrial, doctor en Administración y Dirección de Empresas y académico correspondiente de la Real Academia Europea de Doctores-Barcelona 1914 (RAED), ha querido compartir con los académicos y amigos de la RAED su pasión por la fotografía, para la que siempre ha encontrado un hueco en su labor como reconocido gestor empresarial. Bajo el título «Paseo de otoño 2018», presenta la última recopilación de sus instantáneas, realizadas estas últimas semanas.

«El otoño es verano e invierno a la vez y se presenta con vistas infinitamente bellas. Cielos espectaculares con nubes grises o rojizas, con combinaciones inimaginables. El otoño permite el espectáculo de la enorme potencia de las primeras tormentas eléctricas. La cámara capta a tiempo lo que es irrepetible. Los cielos claros que el viento limpia posibilitando observar lunas bellísimas al desaparecer la contaminación, o la observación de estrellas y planetas sin olvidar los artefactos aéreos. Los arboles caducifolios mudan su verde por una paleta de colores de amarillos, ocres, rojos… alfombrando el suelo», explica el fotógrafo su admiración por lo que consigue captar con su cámara.

Pons explica cómo descubrió la fotografía en la década de los años 80 del siglo pasado llevado tanto por su interés por el proceso químico que suponía la revelación de los negativos en la fotografía de papel como por su cercanía con las secciones de fotografía de los diarios «El País» y «Avui», donde trabajó como directivo. «La química y la comunicación han dado contenido a mi carrera. Los sistemas digitales o informáticos han posibilitado grandes desarrollos explorando los espectros de la luz, infrarrojo y ultravioleta. La fotografía usa una tecnología que capta a través de lentes y sensores, ahora electrónicos, puntos de luz con sus colores e intensidades en espectros visibles», señala.

«En mi profesión como directivo en medios de comunicación, tuve la oportunidad de impulsar la digitalización de los procesos de fotografía, incluido el archivo de los fondos del diario «Avui». Y gracias a mi etapa anterior en el diario «El País» conocí más a fondo y valoré la tarea de los profesionales que se ocupaban de la información gráfica. Y también viví el inicio de un momento en que la tecnología se hacía accesible a un creciente número de personas», concluye.