Daniel Turbón
Catedrático emérito de Antropología Física de la Universidad de Barcelona y académico de número de la Real Academia Europea de Doctores-Barcelona 1914 (RAED)

Daniel Turbón, catedrático emérito de Antropología Física de la Universidad de Barcelona y académico de número de la Real Academia Europea de Doctores-Barcelona 1914 (RAED), ha publicado en los prestigiosos «Annals of Human Biology» el estudio «Phenotypic diversity and history of the Congo Basin populations: Equatorial Guinea, Bantu Speaking Central Africans and African Pygmies», donde traza el origen de las poblaciones centroafricanas. El artículo, firmado junto a la antropóloga de la Universidad del País Vasco Esther Rebato y el profesor de Bioestadística de la Universidad de Barcelona Miquel Salicrú, apareció en la versión online de esta publicación el pasado 6 de abril.

Tras analizar la diversidad fenotípica adulta de nueve poblaciones de la cuenca del Congo y la isla de Bioko, que fueron caracterizadas antropométricamente en 1948, los investigadores identificaron diversos grupos que interpretaron como probable mezcla de poblaciones pigmeas locales y bantúes que quedan establecidas en este estudio como referencia para futuros trabajos genéticos y redunda en la hipótesis de que las poblaciones pigmeas africanas fueron uno de los primeros grupos de pueblos de la selva tropical de la cuenca del Congo en separarse del resto de la humanidad moderna.

Daniel Turbón

Dr. Daniel Turbón

«La llegada de agricultores de habla bantú de 5.000 años antes de Cristo llevó a la formación de un gran número de complejos étnicos en África Central y la zona costera del Atlántico, principalmente debido a un flujo unidireccional de mujeres pigmeas. En la actualidad sólo hay unos pocos pequeños contingentes de grupos de población pigmeos africanos que son mixtos o que casi han desaparecido como resultado de los flujos migratorios de Camerún», se explica en la introducción del estudio.

Como método de trabajo, los investigadores generaron una matriz de interdistancias entre poblaciones, utilizando las 21 variables, con la distancia euclidiana entre los vectores medios relativos a las variables estandarizadas. «Cuando se utilizó el método de grupos de pares no ponderados con media aritmética por separado en hombres y mujeres, los árboles filogenéticos mostraron una clara separación entre las poblaciones», señalan. Eso les llevó a determinar que las medidas corporales que distinguen con mayor eficacia a los grupos son las dimensiones lineales y el ancho de las caderas y la circunferencia torácica media.

Como conclusión, el estudio determina que las muestras de Guinea Ecuatorial muestran una gran superposición entre grupos y variaciones considerables dentro de los grupos. También hay diferencias notables entre las poblaciones de pigmeos africanos en términos de altura, pero no en proporciones corporales.

 

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