Cecilia Kindelán, miembro del Instituto de Cooperación Internacional, reflexionó en el II Congreso Interdisciplinario de la RAED sobre el lenguaje positivo
Cecilia Kindelán, Doctora en Comunicación y miembro del Instituto de Cooperación Internacional de la Real Academia Europea de Doctores-Barcelona 1914 (RAED), presentó en el II Congreso Interdisciplinario de la RAED, celebrado entre los pasados 15 y 17 de febrero en el Hotel Balneario Vichy Catalán, en Caldes de Malavella (Girona), la ponencia «El lenguaje positivo: el efecto de las palabras que elegimos», en la que explicó de forma clara y sucinta cómo el cerebro, el cuerpo y el lenguaje actúan como vasos comunicantes para proveer los mecanismos que aumentan el bienestar físico y emocional.
Kindelán describió las conclusiones a las que llegó el epidemiólogo David Snowdon tras realizar un estudio sobre la incidencia del Alzheimer en un convento de Minnesota hace ya tres décadas. El estudioso certificó que el estado emocional positivo en las etapas tempranas de la vida puede contribuir a que vivamos más y que el uso de palabras positivas no sólo está relacionado con la felicidad y con el éxito, sino también con la longevidad.
Otro experimento recogido por Kindelán que demuestra la influencia de las palabras en la acción es el denominado efecto Florida de John Bargh, en el que unos jóvenes que escuchan unas palabras positivas tardan menos en conseguir el objetivo que los que escuchan palabras negativas. Este efecto es descrito por el premio Nobel de Economía Daniel Kanheman en su obra «Pensar rápido, pensar despacio» al mencionar el efecto ‘priming’: la influencia de una idea en la acción sin que el individuo sea consciente.
Kindelán también hizo mención al reconocido formador y consultor Luis Castellanos, quien en su libro «La ciencia del lenguaje positivo» indica que un entrenamiento en el uso de un lenguaje positivo puede inducir cambios plásticos en el cerebro que pueden transformar nuestros estilos cognitivos, emocionales y sociales.