Joaquín Callabed
Presidente del Club de Pediatría Social, académico correspondiente de la Real Academia de Medicina de Zaragoza, de la Real Academia de Medicina de Catalunya y de la Real Academia de Nobles y Bellas Artes de San Luis y académico de número y vicepresidente de la Sección de Ciencias de la Salud de la Real Academia Europea de Doctores-Barcelona 1914 (RAED)
Artículo publicado en la revista «Aragón artístico y monumental» en su edición correspondiente a junio de 2020
Joaquín Callabed, presidente del Club de Pediatría Social y académico de número y vicepresidente de la Sección de Ciencias de la Salud de la Real Academia Europea de Doctores-Barcelona 1914 (RAED), publicó en la edición correspondiente a junio de 2020 de la revista de divulgación cultural «Aragón artístico y monumental», editada por el Centro de Iniciativas Turísticas SIPA, el estudio «Una espiga de trigo para el doctor Andrés Martínez Vargas», donde repasa la trayectoria vital y profesional de este médico considerado uno de los grandes impulsores de la Pediatría en España a través de su labor como catedrático en la Universidad de Barcelona y en la Universidad de Granada y promotor de destacadas obras sociales para la infancia como el Instituto Nipiológico de Barbastro.
«Se licenció en Medicina en Zaragoza con premio extraordinario. Se doctoró en Madrid con su tesis ‘Clorosis. Critica de las teorías patogénicas’. El doctor Antonio Espinosa Capo, a su regreso de Estados Unidos y México, donde siguió su formación, le informa de la creación de cátedras de Pediatría y le motiva para opositar. No estaba muy decidido, pero consigue la cátedra de Pediatría de Granada en 1886, con 27 años», inicia Callabed el relato de la trayectoria académica y profesional de Martínez Vargas, quien tras este inicio en la docencia pronto se trasladó a Barcelona.
El académico destaca las actividades profesionales y sociales de este facultativo nacido en Barbastro en la capital catalana, así como las actividades y publicaciones científicas que rápidamente lo posicionaron como un referente en la atención médica a la infancia en España. Callabed se detiene en la fundación, en 1916, del primer Instituto Nipiológico de España, en Barbastro. «El objetivo de este centro era disminuir la mortalidad infantil mediante consejos a las madres del modo de cuidar los niños, así como la ayuda en su alimentación. En una evaluación realizada en los primeros diez años del centro se valora que se habían salvado 430 niños, que supone una reducción del 80% de la mortalidad infantil previa a la creación del centro», explica.
«Andrés Martínez Vargas es uno de los fundadores de los cimientos de la Pediatría moderna cuando se desgaja de la disciplina de la Ginecología. Imprime a la Pediatría un importante acento social aplicado a las condiciones del entorno existente, especialmente en Granada, Barcelona y Barbastro», concluye Joaquín Callabed su estudio y particular homenaje a este reconocido facultativo que cambió la Pediatría en España entre finales del siglo XIX y principios del XX.