Teresa Freixes
Catedrática de la Facultad de Derecho de la Universidad Autónoma de Barcelona y académica de número y vicepresidenta de la Real Academia Europea de Doctores-Barcelona 1914 (RAED)
Teresa Freixes, académica de número y vicepresidenta de la Real Academia Europea de Doctores-Barcelona 1914 (RAED), reflexiona en la última entrada de su blog personal (teresafreixes.wordpress.com), «El salto adelante», sobre el acuerdo alcanzado en el seno del Consejo de Europa para financiar lo que debe ser una recuperación económica de todos los países miembros de la Unión Europea, sin que por ello ninguno tenga que afrontar una factura inasumible para su economía, lejos del ejemplo del rescate que se dio tras la crisis financiera de 2008.
«La Comisión hizo bien su trabajo. Propuso una metodología y unos contenidos que han constituido la base para el acuerdo que ha tomado, finalmente, el Consejo. No hace falta esperar a después del verano. Ahora es necesario que el Parlamento Europeo haga sus aportaciones y, si el sistema jurídico-constitucional de los Estados miembros lo exige, el acuerdo de su propio parlamento. Ha habido un acuerdo que es un paso muy importante. Se ha acordado, por primera vez, una ‘mutualización’ de la deuda, al financiar el acuerdo con deuda común, cosa que hasta ahora fue imposible», señala la vicepresidenta de la RAED en el inicio de su reflexión.
La académica confía en que ni las cuestiones políticas, dentro o fuera de cada país, ni el veto de los países pequeños puedan poner en peligro este acuerdo histórico impulsado y refrentado por estados como Alemania, Francia, Italia y España, que representan más del 80% del PIB de la Unión Europea. Asimismo, confía en los mecanismos de control que recoge el texto para que ninguno de los socios acabe incumpliendo sus puntos principales.
«No hay nada incondicionado y habrá que presentar un plan (cada Estado miembro) en el que consten las previsiones acerca de cómo se van a utilizar esos fondos europeos. El control se va a realizar a través del Comité Económico y Financiero, que es un órgano consultivo del propio Consejo Europeo formado por altos funcionarios de los gobiernos y del Banco Central Europeo, que será el encargado de evaluar, por consenso, si el dinero se gasta correctamente teniendo en cuenta las directrices generales de la UE», explica.