Dr. Francisco López Muñoz
Francisco López Muñoz, profesor de Farmacología y vicerrector de Investigación, Ciencia y Doctorado de la Universidad Camilo José Cela y académico de número de la Real Academia Europea de Doctores-Barcelona 1914 (RAED), reflexiona sobre el nuevo medicamento que ha entrado en uso en España para el tratamiento de los trastornos depresivos severos en el artículo «Esketamina, el novedoso antidepresivo intranasal para los casos resistentes», publicado en el portal de divulgación científica The Conversation el pasado 20 de noviembre y reproducido en diversos medios digitales españoles e hispanoamericanos. López Muñoz firma el trabajo junto a José Antonio Guerra Guirao, profesor de Farmacología y Toxicología de la Universidad Complutense de Madrid.
Los dos expertos explican que este tratamiento que se administra por vía intranasal ya estaba autorizado desde el año 2019 por la Agencia Europea del Medicamento y por la Administración de Alimentos y Medicamentos de Estados Unidos. «Los expertos lo han catalogado como un ‘avance revolucionario’ en el manejo de la depresión. Sin embargo, también presenta ciertas zonas oscuras», señalan López Muñoz y Guerra Guirao antes de describir sus pros y sus contras para el tratamiento de una enfermedad que afecta a 180 millones de personas en el mundo, según la Organización Mundial de la Salud. En cuanto a la prevalencia de la depresión mayor a lo largo de un año alcanza, según estos cálculos, al 6 % de la población y el riesgo en las mujeres es el doble que en los hombres. Asimismo, la depresión es la principal causa de discapacidad en la actualidad.
«La respuesta clínica a los antidepresivos tradicionales es inadecuada o incompleta entre el 40% y el 50% de los pacientes y un tercio no responde a los tratamientos actualmente disponibles. Cuando un paciente no responde, al menos, a dos tratamientos diferentes con antidepresivos durante un episodio depresivo moderado o grave actual, hablamos de depresión resistente al tratamiento. Esta alta incidencia de la depresión resistente, unida a las limitaciones de los antidepresivos disponibles hasta este momento, ha empujado a buscar alternativas como la esketamina», explican los expertos.
Para López Muñoz y Guerra Guirao, la esketamina parece un fármaco relativamente seguro, ya que se ha analizado largamente en estudios que ya han superado la fase III y sus principales reacciones adversas son de naturaleza neuropsiquiátrica y gastrointestinal, aparecen de forma inmediata y se suelen resolver en el mismo día. Con respecto a la eficacia -señalan- en dos de los estudios a corto plazo realizados no se alcanzó significación estadística, lo que genera incertidumbre por la inconsistencia de los resultados entre estudios. Sin embargo, los expertos alertan del riesgo de abuso por los efectos disociativos que puede llegar a producir el fármaco, además de su elevado coste. «En cualquier caso, los resultados prometedores de la esketamina y lo novedoso de su administración y mecanismo de acción abre un nuevo camino y plantea un horizonte terapéutico alternativo para los pacientes con depresión», concluyen.
