Dr. Pedro Nueno
Pedro Nueno, profesor de la escuela de negocios IESE-Universidad de Navarra, presidente de la Escuela de Negocios Internacional China-Europa y académico emérito de la Real Academia Europea de Doctores (RAED), protagoniza un amplio reportaje publicado el pasado 20 de julio en el suplemento económico «Dinero», del diario «La Vanguardia», que firma el reconocido periodista económico Manel Pérez, en relación con la celebración de una nueva reunión del Grupo de Harvard que lidera el propio académico, en esta ocasión en la ciudad marroquí de Marrakech, un nuevo polo de atracción para la economía internacional gracias a su situación geográfica, que le permite ser un puente entre África y Europa, y una posición estratégica por la estrecha relación estructural que mantiene el país con Estados Unidos.
En la cita participaron, entre otros destacados miembros del grupo, actores destacados de la economía catalana y líderes locales, Ildefonso García Serena, decano emérito del Colegio de Marketing y Comunicación de Cataluña y embajador extraordinario y académico de honor de la RAED; Imed Laiti, director de Expert Medical Opinion Morocco; Jordi Cabrafiga, director general de Leitat Technological Center; Arantxa Calvera, directora de la Agencia Catalana de Turismo; Fatima Lahlou, de la consultora African Partners; Lidan Qi, consejera delegada de Puente China-España y colaboradora de la RAED; Antoni Garrell, presidente de HM Hospitals; Francesc Fajula, director general de Mobile World Capital Barcelona; Fernando Casado, presidente de Asepeyo y de la Fundación Formación y Futuro; Josep Maria Romances, consejero delegado de Closa Capital; Jordi Cebrián, director asociado de S&E Partners y director general de las firmas farmacéuticas Dsinco y AreaFar; Columna Martí, pintora y esposa de José Creuheras, presidente del Grupo Planeta y la corporación Atresmedia; Salomé Cañeque, presidenta de la promotora inmobiliaria Proemio, o Guillermo Crehueras, consejero delegado del grupo MS.
«El tópico encasilla a Marruecos como un modelo económico de exportación de productos agrícolas y materias primas como el fosfato, con altos niveles de pobreza y alejada de las prácticas democráticas occidentales, pero que sigue siendo un polo de atracción para los capitales que buscan bajos costes laborales, en torno al 20% de los españoles. Pero a la sombra de esa visión, avanza una economía en rápido desarrollo, que potencia su turismo, juega un papel financiero relevante en el continente africano, se moderniza con nuevas inversiones en infraestructuras y desempeña un rol creciente en el tablero de la política mundial», introduce el reportaje un encuentro en el que se abordaron las oportunidades que ofrece el país para las inversiones españolas y los intercambios comerciales entre ambas orillas del Estrecho de Gibraltar.
Manel Pérez explica, recogiendo la exposición de Lahlou, las principales claves operativas que ofrece el país: precios estables, un 2% de inflación anual desde el año 2009; una divisa, el dirham, sin oscilaciones desde hace 25 años, 11 por cada euro y libremente convertible para los inversores extranjeros; tratados de doble imposición fiscal con más de cincuenta países; libre repatriación de beneficios y sin necesidad de contar con un socio local para operar en el país. Además, añadió, de acuerdos de libre comercio con distintas áreas y países que facilitan los intercambios con mercados que agrupan a unos 2.500 millones de personas. En el ámbito de las infraestructuras destacó la red de alta velocidad ferroviaria que une Tánger, Casablanca y Rabat y que acabará conectando también Marrakech y Agadir.
«Los empresarios catalanes y españoles juegan un papel destacado en esa evolución de Marruecos, no en balde son los primeros inversores industriales extranjeros en el país, un proceso que arrancó hace ya muchos años con las empresas textiles. Muchos lo hacen también ahora, pero sigilosamente, no quieren ser acusados en el país de origen de exportar puestos de trabajo, deslocalizar. Los sectores hacia los que se dirige esa inversión más especialmente son el de componentes del automóvil, farmacia e ingeniería. Mención aparte requiere el sector turístico, ya que Marruecos recibió el año pasado más de ocho millones de visitantes extranjeros, más otros tantos nacionales pero residentes en el exterior. Las grandes cadenas hoteleras españolas, desde Barceló a Meliá o NH, ya están presentes en el país. También hay empresas españolas de gestión de residuos», añade el cronista antes de repasar de forma sucinta las intervenciones de los participantes en el encuentro.
