El historiador mexicano Enrique Sada, colaborador de la Real Academia Europea de Doctores-Barcelona 1914 (RAED), aborda el grave problema de la violencia vinculada al narcotráfico que sufre México y las advertencias que han llegado al Gobierno mexicano desde Washington en este sentido en el artículo «En caso de intervención extranjera», publicado en el portal especializado Código Libre el pasado 24 de abril. Una reflexión en la que el experto lamenta tanto la situación por la que pasa su país como el populismo e ineficacia con la que responde su Ejecutivo.
«Un fantasma vuelve a aparecer en la escena de la vida nacional, y es el fantasma de una intervención extranjera. En una semana bastante álgida -previo a que desapareciera de un evento público y tuviera que ser internado de urgencia-, durante la ceremonia del 109 aniversario de la última ocupación (oficial) militar del Gobierno norteamericano en Veracruz, el presidente de México rechazó la intervención de otros gobiernos en nuestro país, sin especificar si se refería a Estados Unidos», inicia Sada su argumentación refiriéndose a un episodio protagonizado por el presidente de México, Andrés Manuel López Obrador.
El historiador recuerda que la última intervención de Estados Unidos en México se produjo en 1914, cuando la Armada estadounidense ocupó Veracruz tras el acercamiento del régimen de Victoriano Huerta con el Imperio Alemán, un hecho rechazado abiertamente por los mexicanos, que se unieron para oponerse con las armas, llegando incluso a tumbar como protesta la estatua erigida a George Washington en la capital. «Usando este contexto histórico, López Obrador insistió en que no permitiría la intervención de Estados Unidos para combatir a los narcotraficantes y darles trato de terroristas», añade.
Para Sada, estas palabras del mandatario carecen de todo valor y responden simplemente a un llamamiento populista cuando las muertes vinculadas al narcotráfico a lo largo y ancho del país superan en apenas dos años de mandato a las de sus últimos predecesores. «Finalmente remató con que ante una posible ‘invasión’ en este caso ‘no van a defender a México solo los marinos y los soldados, vamos a defender a México todos los mexicanos’; algo que, a diferencia de cuando el huertismo, muy pocos mexicanos hoy en día estarían dispuestos a hacer en favor de un Gobierno que, al igual que el que se evoca, ha permitido y fomentado hasta la fecha la violación de la Constitución y los Derechos Humanos», concluye el colaborador de la RAED.