«Las empresas familiares son fundamentales para nuestra economía -reflexiona el académico-. Representan, aproximadamente, el 90% de la actividad y la ocupación. Desgraciadamente, muchos estudios indican que sólo el 40% sobrevive a la segunda generación y sólo el 15% llega a la tercera». Amat expone estas tesis en un artículo que publica la última edición de «L’Econòmic», el suplemento de Economía del diario «El Punt Avui».