Geòrgia Sarquella
Directora de la Unidad de Arritmia Pediátrica y Muerte Súbita del Hospital Maternoinfantil Sant Joan de Déu de Barcelona y académica electa de la Real Academia Europea de Doctores-Barcelona 1914 (RAED)
Geòrgia Sarquella, directora de la Unidad de Arritmia Pediátrica y Muerte Súbita del Hospital Maternoinfantil Sant Joan de Déu de Barcelona y académica electa de la Real Academia Europea de Doctores-Barcelona 1914 (RAED) intervino el pasado 29 de septiembre en el programa «Tot es mou» del canal de televisión TV3, con motivo del Día Internacional del Corazón, para hablar sobre las enfermedades cardiovasculares, que hoy por hoy son la principal causa de muertes en el mundo, en conversación con la abogada y periodista Magda Oranich, que fue intervenida del corazón hace siete años.
La especialista, parte de una conocida saga de cardiólogos, señaló cómo el corazón se puede cuidar de muchas formas, desde los hábitos de una madre cuando late el corazón del feto, ayudando así a evitar muertes precoces relacionadas con disfunciones cardíacas o la conocida muerte súbita del bebé, a los hábitos de niños y adultos manteniendo una alimentación saludable, practicando ejercicio diario moderado, evitando el sedentarismo y combatiendo la obesidad en el caso de producirse. Pero por encima de todo ello, Sarquella apuntó a la felicidad como elemento clave para la salud del corazón.
«Conocemos las prácticas saludables, pero más de la mitad de nuestra salud pasa por ser felices, y para ello el entorno es muy importante. Hay que sentirse seguro y querido, sentir que tu entorno más inmediato te cuida, porque todo puede influenciar en el bienestar del corazón», señaló la académica electa, que apuntó como otro elemento fundamental tener conciencia de los síntomas que suelen acompañar a la enfermedad, y que no siempre son percibidos de la misma forma por diferentes personas, con una marcada diferencia en la sensación de riesgo entre hombres y mujeres.
«La principal diferencia es que las mujeres solemos presentar escusas que justifican los síntomas. Y el problema también está en la percepción que tienen los propios sanitarios. Porque si una mujer se presenta en urgencias con dolor en el pecho lo más probable es que acabe con un Valium bajo la lengua, pero si es un hombre, lo normal será que le hagan un electrocardiograma», denunció públicamente la experta. Sarquella, sin embargo, se muestra optimista sobre la evolución de esta desigualdad. «Que el 80% de los estudiantes del ámbito sanitario ya sean mujeres cambiará el paradigma, sobre todo cuando los ensayos clínicos se realicen desde la igualdad de sexos», señaló.
Por su parte, Magda Oranich explicó su propia experiencia como paciente de una grave enfermedad cardíaca, coincidiendo con esa falta de conciencia de muchas mujeres de los síntomas que alertan sobre este tipo de patologías. En este sentido se felicitó por las recientes campañas de sensibilización dirigidas de forma específica a las mujeres.