Pedro Nueno
Titular de la Cátedra Fundación Bertrán de Iniciativa Empresarial de la Escuela de Negocios IESE-Universidad de Navarra, presidente de la Escuela de Negocios Internacional China-Europa y académico de número y presidente de la Sección de Ciencias Sociales de la Real Academia Europea de Doctores-Barcelona 1914 (RAED)
Artículos publicados en el diario «La Vanguardia» el 16, 23 y 30 de mayo de 2021
Pedro Nueno, profesor de IESE-Universidad de Navarra, presidente de la Escuela de Negocios Internacional China-Europa y académico de número y presidente de la Sección de Ciencias Sociales de la Real Academia Europea de Doctores-Barcelona 1914 (RAED), reflexiona sobre la actualidad desde una mirada mordaz y una severa experiencia en los artículos «Infravalorando», «Conduciendo» y «Recordando», que ha ido publicando en el diario «La Vanguardia» entre los pasados 16 y 30 de mayo.
En «Infravalorando» aborda los prejuicios más extendidos sobre China y su modelo de conocimiento y de progreso, así como el trato desigual de Occidente hacia sus empresas, con el ejemplo del boicot de la Casa Blanca a una de sus empresas emblema en tecnología, Huawei, cuando las grandes empresas occidentales no solo no encuentran barreras en China, sino que hacen buenos negocios en un mercado prácticamente sin límites. «Vivimos en una economía global, y la velocidad de la gestión sube con la innovación y la digitalización. El gran mercado chino facilita el desarrollo de empresas capaces de salir al mundo y veremos más. En lugar de criticar esto formemos mejor a nuestros directivos. Si tenemos buenos productos y procesos, llevémoslos a China y si no, seamos los facilitadores de su entrada y desarrollo en Europa. Pero dejemos de criticarles. Pueden ser nuestra solución para el futuro. Valorémoslos», señala.
En «Conduciendo», el académico de la RAED valora la excelente salud del mercado automovilístico en Estados Unidos, fundamentado en buen parte en el buen hacer de los concesionarios a la hora de comercializar los vehículos, fruto de la formación de sus empleados. Un extremo que en Europa prácticamente no se tiene en cuenta, pero que puede marcar el desarrollo del mercado de vehículos eléctricos. «El impacto de la formación es positivo y parece que los empleados de los concesionarios a los que forman son más estables a pesar del crecimiento de oportunidades para los mejor preparados. Si saben que la red de concesionarios en la que trabajan envía cada año a algunos empleados a buenos cursos, tienen paciencia para esperar que les toque y, en el fondo, piensan que con ello mejorarán su valor en el mercado. Muchos valoran esa formación, pero también la posibilidad de coincidir unos días con colegas de otros concesionarios y comentar con ellos cómo ven el sector, las marcas, etcétera», explica Nueno.
Por último, en «Recordando», rememora una sesión que él mismo organizó en IESE para poner de relevancia el ejemplo del aeropuerto de Boston cuando, bajo la dirección de John Quelch, en invitado estrella, supo independizarse del aeropuerto JFK de Nueva York para contar con sus propios vuelos directos. Una apuesta que disparó el interés por Boston de muchos viajeros profesionales, de estudios o de ocio y que supone un excelente ejemplo para Barcelona. «Quelch descubrió que las decisiones sobre los vuelos las tomaba el aeropuerto de Nueva York. Boston tenía pocas conexiones internacionales. Para ir de Boston a Londres había muchos vuelos de Boston a Nueva York y desde Nueva York había varios vuelos a Londres. Pero a John Quelch le parecía que a las empresas, universidades y hospitales de Boston les convenían los vuelos directos a Londres, París, Barcelona, Múnich, Zúrich, Madrid, etcétera. Eso estimularía más desplazamientos y no perjudicaría al aeropuerto JFK de Nueva York. Le costó poder ‘independizar’ las decisiones de vuelos desde Boston, pero lo logró. Lo siguiente fue negociar con las aerolíneas. Quelch nos contó que costó convencer a las aerolíneas, pero cuando aceptaban probar veían que él tenía razón», concluye.