La Fundación Clarós, fundada y presidida por Pedro Clarós, académico de número y vicepresidente de la Real Academia Europea de Doctores-Barcelona 1914 (RAED), recuerda en un boletín especial la misión que realizó el pasado verano en Cabo Verde para completar la misión que se vio interrumpida por la grave enfermedad que contrajo el doctor Clarós. La Fundación viajó al país africano aprovechando las vacaciones de Semana Santa y ya allí, el académico padeció una pancreatitis aguda que lo obligó a ser repatriado en un avión medicalizado y a permanecer cinco semanas hospitalizado en Barcelona. Ya recuperado, el propio Clarós animó a su equipo para regresar y completar la misión.
Constituida hace más de dos décadas, la Fundación Clarós ha realizado ya más de un centenar de misiones en una veintena de países de África, Asia y Europa, donde ha llevado a cabo intervenciones sobre tumores de cuello y de cara, reconstrucciones de la cara por traumatismos y enfermedades tropicales e incluso por amputaciones. Cirugías a las que los beneficiarios no tenían acceso. A un ritmo de entre seis y siete al año, la Fundación ha superado actualmente las cien misiones.
Al trabajo in situ se suma una beca para médicos sin recursos especializados en el campo de la otorrinolaringología, la especialidad en la que Clarós es un reconocido experto internacional, que ha traído a Barcelona a facultativos de diversos países en vías de desarrollo que han aprendido las últimas técnicas quirúrgicas. «Creo que en todos estos años hemos podido hacer cosas muy importantes. Lo más importante es que hemos podido operar a un gran número de pacientes sin recursos y que difícilmente podrían haber podido sanar. Y así hemos conseguido cambiar la vida a mucha gente», recuerda Clarós en una entrevista publicada en el último número de Tribuna Plural, la revista de la RAED.