Maria Àngels Calvo
Catedrática de la Facultad de Veterinaria de la Universidad Autónoma de Barcelona; Académica de número de la Real Academia de Medicina de Cataluña, de la Real Academia de Farmacia de Cataluña, de la Academia de Ciencias Veterinarias de Cataluña, de la Real Academia de Doctores de España y de la Real Academia Europea de Doctores-Barcelona 1914 (RAED).
Entrevista concedida a Ràdio 4, de RNE, el 17 de junio de 2020
Maria Àngels Calvo, catedrática del Departamento de Anatomía y Sanidad Animal de la Universidad Autónoma de Barcelona, secretaria general de la Academia de Ciencias Veterinarias de Cataluña y académica numeraria y vicepresidente de la Real Academia Europea de Doctores-Barcelona 1914 (RAED), insistió en la importancia de la implicación y participación de los especialistas en salud animal en los comités científicos de expertos en la lucha contra la actual pandemia de la Covid-19 en una entrevista concedida al programa «De boca a orella» de Ràdio 4, una de las emisoras de Radio Nacional de España (RNE) en Cataluña.
Calvo explicó cómo en Alemania uno de los principales responsables en el control de la pandemia es un veterinario. «Creemos que nosotros tenemos mucho que decir, sobre todo en prevención. Pero es cierto que a nosotros, desde la Academia de Ciencias Veterinarias de Cataluña, no se nos ha pedido consejo», explicó. La académica defendió su argumento basándose en una prueba irrefutable: el origen zoonótico del coronavirus SARS-CoV-2, cuyo origen se sitúa en los murciélagos, aunque aún no se ha podido determinar la existencia de un huésped animal intermedio: «Se habló del pangolín, después se dijo que no y se empezó a hablar de una serpiente y hasta de perros, pero lo único que sabemos es que esto no tiene nada que ver con la alimentación, porque no se ha podido demostrar que esta vía sea responsable de una transmisión de este tipo», señaló.
La académica defendió en todo momento que no existe ningún tipo de pruebas que vinculen el contagio con la alimentación, como señalan tanto la Organización Mundial de la Salud (OMS) como la Agencia para la Alimentación de Naciones Unidas (FAO). «Estos días se especula sobre un nuevo foco de contagio en China vinculado con el corte de salmón en unas tablas de madera. Creo que más que en un alimento contaminado deberíamos pensar en una persona que ejerza como transmisora. Aún no tenemos clara ni la supervivencia del virus sobre superficies ni el tiempo que puede estar circulando en el aire en ambiente húmedos como pueden ser este tipo de mercados».
Para Calvo debemos centrar todos los esfuerzos en la prevención y tener paciencia con la anunciadas vacunas. «Se está trabajando para que otras vacunas vinculadas con otros coronavirus se puedan adaptar a este nuevo virus y acelerar así el proceso de creación, aunque una vacuna necesita un proceso largo y con un nivel de seguridad muy alto. Los denominados fracasos posvacunales son muy graves, así que no nos podemos arriesgar. El proceso de control tiene que ser muy riguroso. Siempre hablamos de un año y medio, y deberíamos tener muy asumido que será así», concluyó.